Palma,16-07-2009,ultimahora.es
Los policías locales detuvieron a tres hombres tras impedirles el acceso a la mezquita palmesana. Foto: VASIL VASILEV
Los agentes querían entrar en el recinto en busca de dos sospechosos
Un incidente trivial -el alto policial a dos motoristas que circulaban sin casco- provocó un gravísimo enfrentamiento en la noche del martes entre policías locales y árabes de la mezquita de Pere Garau. Los dos sospechosos se refugiaron en el recinto religioso y cuando los agentes intentaron entrar se encontraron con una multitud que formó una barrera humana y les cerró el paso.
A las 22.40 horas agentes de la Policía Local detectó el ciclomotor con los dos jóvenes por la calle Lluís Martí. Les dio el alto, pero los chavales huyeron y se inició una persecución. Los fugados llegaron a la calle Juan Mestre, se bajaron en marcha de la moto y se introdujeron en la mezquita. Los funcionarios se disponían también a entrar y fueron bloqueados por una multitud de fieles musulmanes. Juan Peralta Rosado, español convertido al Islam y llamado ahora Abdulá, les indicó a los agentes: «Aquí no váis a entrar. Esto es un lugar privado», según consta en el informe policial. Los funcionarios pidieron refuerzos y la tensión fue en aumento.
Numerosos musulmanes formaron una barrera humana y desde el interior de la mezquita indicaron a los agentes que debían «descalzarse y dejar las armas» si pretendían entrar. Francisco Javier Jiménez Jiménez, también convertido al Islam y de nombre actual Uzman, «en estado de elevada excitación y agresividad» golpeó a un agente, siempre según la versión del 092. Fue entonces cuando Abdulá, Uzman y un tercer individuo, un marroquí llamado Driss J. fueron arrestados por atentado y desobediencia contra agentes de la autoridad.
La actuación policial no aplacó los ánimos y decenas de magrebíes, entre 100 y 150, se desplazaron de noche al cuartel de San Fernando exigiendo la puesta en libertad de los tres musulmanes. La tensión se prolongó hasta la madrugada.
Noreddine Belmeddah, en nombre de la Lliga Musulmana, fue muy crítico ayer con la actuación de la Policía Local de Palma «que intervino en la mezquita sin cortesía ni educación». Según Noreddine, «al Sr. Jiménez lo cogieron en volandas y lo esposaron en el suelo», con gran violencia. «Algo parecido le ocurrió al Sr, Peralta», sostiene Noreddine, que ayer se reunió con el comisario Nicolás Herrero, jefe de la Policía Local de Palma.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
Los policías locales detuvieron a tres hombres tras impedirles el acceso a la mezquita palmesana. Foto: VASIL VASILEVLos agentes querían entrar en el recinto en busca de dos sospechosos
Un incidente trivial -el alto policial a dos motoristas que circulaban sin casco- provocó un gravísimo enfrentamiento en la noche del martes entre policías locales y árabes de la mezquita de Pere Garau. Los dos sospechosos se refugiaron en el recinto religioso y cuando los agentes intentaron entrar se encontraron con una multitud que formó una barrera humana y les cerró el paso.
A las 22.40 horas agentes de la Policía Local detectó el ciclomotor con los dos jóvenes por la calle Lluís Martí. Les dio el alto, pero los chavales huyeron y se inició una persecución. Los fugados llegaron a la calle Juan Mestre, se bajaron en marcha de la moto y se introdujeron en la mezquita. Los funcionarios se disponían también a entrar y fueron bloqueados por una multitud de fieles musulmanes. Juan Peralta Rosado, español convertido al Islam y llamado ahora Abdulá, les indicó a los agentes: «Aquí no váis a entrar. Esto es un lugar privado», según consta en el informe policial. Los funcionarios pidieron refuerzos y la tensión fue en aumento.
Numerosos musulmanes formaron una barrera humana y desde el interior de la mezquita indicaron a los agentes que debían «descalzarse y dejar las armas» si pretendían entrar. Francisco Javier Jiménez Jiménez, también convertido al Islam y de nombre actual Uzman, «en estado de elevada excitación y agresividad» golpeó a un agente, siempre según la versión del 092. Fue entonces cuando Abdulá, Uzman y un tercer individuo, un marroquí llamado Driss J. fueron arrestados por atentado y desobediencia contra agentes de la autoridad.
La actuación policial no aplacó los ánimos y decenas de magrebíes, entre 100 y 150, se desplazaron de noche al cuartel de San Fernando exigiendo la puesta en libertad de los tres musulmanes. La tensión se prolongó hasta la madrugada.
Noreddine Belmeddah, en nombre de la Lliga Musulmana, fue muy crítico ayer con la actuación de la Policía Local de Palma «que intervino en la mezquita sin cortesía ni educación». Según Noreddine, «al Sr. Jiménez lo cogieron en volandas y lo esposaron en el suelo», con gran violencia. «Algo parecido le ocurrió al Sr, Peralta», sostiene Noreddine, que ayer se reunió con el comisario Nicolás Herrero, jefe de la Policía Local de Palma.
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