Día de ayuda y recompensa

Un momento de la oración en la fiesta de la ayuda, en la que finaliza el Ramadán de los musulmanes, ayer en el polideportivo de Can Coix / Moisés Copa

Unos mil musulmanes residentes en diferentes pueblos de la isla de Eivissa celebran la fiesta de final del Ramadán. La jornada se inició en el polideportivo Sa Pedrera, en el polígono de Can Coix de Sant Antoni, donde tuvo lugar el rezo dirigido por el imán

Los musulmanes que viven en la isla de Eivissa acudieron ayer al rezo de final del Ramadán, convocado por la Comunidad Religiosa Islámica Mezquita Al Fath. El acto se desarrolló en el polideportivo Sa Pedrera de Sant Antoni, en el polígono de Can Coix, desde las nueve de la mañana, donde se concentraron cerca de un millar de practicantes del credo islámico. La gran mayoría eran marroquíes, aunque había también senegaleses, argelinos y mauritanos. Además de la oración se llevó a cabo una colecta para crear un fondo de ayuda para las personas necesitadas.

Sant Antoni,1 de octubre de 2008,diariodeibiza.es, Pep Ribas

Unas mil personas pertenecientes a la comunidad musulmana de la isla de Eivissa participaron ayer en el rezo de final del Ramadán, que se celebró por la mañana en el polideportivo Sa Pedrera de Sant Antoni, situado en el polígono de Can Coix.
Al acto acudieron hombres, mujeres y niños, que compartieron el rezo dirigido por el imán, aunque tal como establecen los usos de esta religión, los hombres ocupaban la parte delantera del recinto, mientras que las mujeres se situaban detrás.

El rezo duró unos veinte minutos, durante los cuales el imán se dirigió a los fieles con un discurso en el que exaltó la importancia de que las familias estén unidas y de que entre unas y otras se ayuden para poder hacer frente a cualquier adversidad. El día del final del Ramadán es una fecha importante para los mahometanos, que la llaman Aid al Fitr.

«Para nosotros es una fiesta, un día de recompensa, porque hemos terminado el mes de Ramadán sin pecar y cumpliendo las obligaciones de nuestra religión. También es un día de alegría para los niños, porque pueden comer dulces y les sacamos para que puedan jugar y pasear», relata Adel El Asri, secretario de la asociación Mezquita al Fath, que organiza las celebraciones conjuntas para todos los musulmanes de la isla de Eivissa. Acudieron al acto miembros de la comunidad de Sant Antoni, Santa Eulària y Vila.

La fiesta Aid al Fitr es también una jornada dedicada a la ayuda a los necesitados. Para ello, se lleva a cabo una recolecta a la que todos los asistentes al rezo aportan una cantidad simbólica de cinco euros. Esta paga (azakat) se destina a ayudar a las personas de la comunidad que carecen de recursos económicos. Edel el Asri asegura que en la isla de Eivissa hay personas musulmanas necesitadas. Es el caso de algunas mujeres divorciadas que tienen niños a su cargo y de enfermos que están sin trabajo y tienen dificultades para subsistir. A estas personas se destina el fondo aportado entre todos en el día de la ayuda islámica.
Después del rezo de la mañana que pone fin al mes de Ramadán los musulmanes dedican el resto de la jornada de la fiesta de Aid al Fitr a visitar a diferentes familias. La celebración la disfrutan especialmente los niños, principales destinatarios de los dulces que elaboran los mayores para esta jornada.

Fiesta en el trabajo

Los trabajadores tratan de obtener fiesta laboral con motivo de esta jornada. La gran mayoría de los musulmanes que viven en Eivissa están ocupados en el sector de la construcción y, según el secretario de Mezquita Al Fath, los empresarios suelen ser comprensivos con esta práctica religiosa y, si no conceden el día libre, por lo menos se permite que acudan al rezo de la mañana y que lleguen más tarde al trabajo.
Añade que los niños, por su parte, no tienen ningún problema en obtener el día libre en sus respectivos colegios.

El mismo portavoz asegura que la gran mayoría de los musulmanes que viven en la isla asisten a las actividades religiosas que organiza la asociación. Entre el ochenta y el noventa por ciento son ciudadanos marroquíes, aunque la comunidad islámica también cuenta con representantes de Senegal, Argelia y Mauritania.

Adel El Asri se muestra agradecido con las autoridades insulares por las facilidades que obtiene la comunidad a la hora de practicar su religión. Afirma que el polideportivo de Can Coix reúne las condiciones adecuadas para una actividad como la de ayer y aprovechó para mandar un mensaje a todos los creyentes de su religión: «En un día como hoy no sólo tenemos que estar más juntos entre nosotros, sino que tenemos que respetar al máximo el país en el que vivimos».

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