Las comunidades musulmanas en Europa deben luchar contra la "guetización"
BRUSELAS,22 de octubre de 2008 (ZENIT.org).-
“No se puede reivindicar libertad religiosa en Europa, y luego negarla en los propios países”. Así lo afirmó el cardenal Jean-Pierre Ricard, arzobispo de Burdeos, en un encuentro que está teniendo lugar estos días en Bruselas con el título “Ser un ciudadano de Europa y una persona de fe. Cristianos y musulmanes como socios activos en las sociedades europeas”.
El encuentro, que concluirá mañana en la capital belga, ha sido organizado por la Conferencia de las Iglesias Europeas (KEK) y el Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE).
El purpurado, cuyas declaraciones recoge el diario L'Osservatore Romano, explica que “tanto ristianos como musulmanes deben colaborar en la defensa y en la promoción de los valores humanos, de la dignidad de la persona y de los derechos humanos fundamentales”.
Esta colaboración, asegura, podría extenderse a “la importancia dada a la familia, el respeto a la dignidad del hombre en todas las situaciones, la justicia social, la atención al medio ambiente y al desarrollo duradero, el rechazo a la gestión puramente de seguridad de los fenómenos migratorios, la educación, la paz social y la paz en el mundo”.
Sin embargo, este diálogo con el Islam “corre el riesgo de perder credibilidad, por que no se puede reivindicar la plena libertad religiosa en Europa y negarla en los países musulmanes”.
Es necesario por tanto, aseguró el cardenal Ricard, que el principio de libertad religiosa “tenga valor recíproco, es decir, que sea válido tanto en Europa como en los países musulmanes”.
Esta libertad religiosa implica, “dentro del respeto al orden público”, una “verdadera libertad de culto”, que permita “la construcción de mezquitas, libertad de asociación y organización interna, gestión de sus propios ministros, enseñanza, actividades caritativas”, etc.
Pero también implica, recordó el purpurado, “el respeto a la libertad de conciencia”, así como la “posibilidad de adherirse libremente a una religión o de abandonarla”.
"Este es un problema sensible para un buen número de musulmanes. Pero yo creo que una integración plena en las sociedades europeas implica esta libertad”, afirmó el cardenal Ricard. “Respetar la libertad de conciencia de quien deja su religión no significa que se apruebe su elección”.
No a los guetos
Para el arzobispo de Burdeos, uno de los riesgos que corren las comunidades musulmanas es el de constituirse en guetos, alimentados por el “fracaso escolar, paro, sensación de no tener lugar ni futuro en la sociedad, rencor y violencia contra una sociedad que no parece tan justa como la de origen”.
En este contexto, el Islam más conservador y anti occidental “podría parecer dar a estos jóveens una identidad y un orgullo que la sociedad no les ofrece”, con la tentación de “constituirse en contra-sociedad”.
Hay, por tanto, “todo un trabajo que hacer en colaboración, que comprende también a otros sectores sociales y políticos, para prevenir las explosiones que pueden producirse en estas situaciones generadoras de violencia y para sacar a la luz las situaciones de exclusión”, añadió.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
BRUSELAS,22 de octubre de 2008 (ZENIT.org).-
“No se puede reivindicar libertad religiosa en Europa, y luego negarla en los propios países”. Así lo afirmó el cardenal Jean-Pierre Ricard, arzobispo de Burdeos, en un encuentro que está teniendo lugar estos días en Bruselas con el título “Ser un ciudadano de Europa y una persona de fe. Cristianos y musulmanes como socios activos en las sociedades europeas”.
El encuentro, que concluirá mañana en la capital belga, ha sido organizado por la Conferencia de las Iglesias Europeas (KEK) y el Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE).
El purpurado, cuyas declaraciones recoge el diario L'Osservatore Romano, explica que “tanto ristianos como musulmanes deben colaborar en la defensa y en la promoción de los valores humanos, de la dignidad de la persona y de los derechos humanos fundamentales”.
Esta colaboración, asegura, podría extenderse a “la importancia dada a la familia, el respeto a la dignidad del hombre en todas las situaciones, la justicia social, la atención al medio ambiente y al desarrollo duradero, el rechazo a la gestión puramente de seguridad de los fenómenos migratorios, la educación, la paz social y la paz en el mundo”.
Sin embargo, este diálogo con el Islam “corre el riesgo de perder credibilidad, por que no se puede reivindicar la plena libertad religiosa en Europa y negarla en los países musulmanes”.
Es necesario por tanto, aseguró el cardenal Ricard, que el principio de libertad religiosa “tenga valor recíproco, es decir, que sea válido tanto en Europa como en los países musulmanes”.
Esta libertad religiosa implica, “dentro del respeto al orden público”, una “verdadera libertad de culto”, que permita “la construcción de mezquitas, libertad de asociación y organización interna, gestión de sus propios ministros, enseñanza, actividades caritativas”, etc.
Pero también implica, recordó el purpurado, “el respeto a la libertad de conciencia”, así como la “posibilidad de adherirse libremente a una religión o de abandonarla”.
"Este es un problema sensible para un buen número de musulmanes. Pero yo creo que una integración plena en las sociedades europeas implica esta libertad”, afirmó el cardenal Ricard. “Respetar la libertad de conciencia de quien deja su religión no significa que se apruebe su elección”.
No a los guetos
Para el arzobispo de Burdeos, uno de los riesgos que corren las comunidades musulmanas es el de constituirse en guetos, alimentados por el “fracaso escolar, paro, sensación de no tener lugar ni futuro en la sociedad, rencor y violencia contra una sociedad que no parece tan justa como la de origen”.
En este contexto, el Islam más conservador y anti occidental “podría parecer dar a estos jóveens una identidad y un orgullo que la sociedad no les ofrece”, con la tentación de “constituirse en contra-sociedad”.
Hay, por tanto, “todo un trabajo que hacer en colaboración, que comprende también a otros sectores sociales y políticos, para prevenir las explosiones que pueden producirse en estas situaciones generadoras de violencia y para sacar a la luz las situaciones de exclusión”, añadió.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario