Rabat, 24 ago 16 (EFE),JAVIER OTAZU.
Los imames nacidos en Europa no suponen ninguna garantía contra el crecimiento del radicalismo en el islam dentro del viejo continente, según el ministro marroquí de Asuntos Islámicos, Ahmed Tawfiq.
En una entrevista con Efe, Tawfiq admite que hay imanes oriundos de países musulmanes que llegan a Europa con un pobre dominio de la lengua del país de acogida, pero en su opinión "el problema no reside únicamente en el conocimiento de una realidad, sino en la interpretación de los principios".
Para el ministro, hay una obsesión "en ciertas mentalidades de países europeos" para que los imanes al cargo de las mezquitas sean nacidos o formados en Europa pero, si eso finalmente sucede, "ni garantizará nada ni cambiará nada".
Marruecos, al igual que Argelia o Turquía, han tratado siempre de tener cierto control sobre las mezquitas dentro de los barrios europeos con una gran población oriunda de esos países, pero muchos analistas creen que lo que falta es exactamente lo contrario: un "islam europeo" que pueda dar respuesta a los problemas de los musulmanes de Europa.
Sin embargo, para Tawfiq "no existe tal cosa como un islam de Francia o un islam de España" y precisa: "El imán tiene que respetar tanto las leyes como las instituciones de España, de Francia o de Marruecos, incluidas las reglas del juego político (...) Su misión es defender los principios generales que definen al islam".
El ministro considera también que debates como el del "burkini" o el del "hiyab" (el velo islámico) son "accesorios", meras expresiones de un debate "social e identitario" que en el fondo perjudican a la religión por distraer la atención de lo que en su opinión es fundamental.
Tawfiq reconoce que el islam se encuentra con frecuencia a la defensiva "a causa del retraso económico y científico de los musulmanes", pero ello no debe conducir a un discurso ofensivo, sino incidir en presentar el islam como "opcional y atractivo", algo que no se logra debido a que "falta una ilustración, un modelo atractivo y convincente".
Ha sido precisamente ese modelo el que muchos jóvenes musulmanes, particularmente de Europa, han ido a buscar en el llamado Estado Islámico (EI), que presenta su "califato" como el lugar donde se puede cumplir con las aspiraciones de los musulmanes.
Sin embargo -recordó- el islam previene contra tres grandes peligros: "la ignorancia, la impostura y el extremismo", tres defectos que pueden atribuirse a los que hoy en día hablan en nombre del islam más radical.
En cuanto a la islamofobia creciente en Europa y en Norteamérica, Tawfiq recordó que hay grandes conocedores del islam antiguo y el actual en el mundo académico occidental, pero que desgraciadamente carecen de predicamento y de influencia pública.
Estos académicos, si tuvieran mayor influencia, podrían "ayudar a los medios de comunicación, que a menudo reaccionan demasiado deprisa", con el fin de producir "un discurso tranquilizador y un análisis crítico" sobre el islam, asegura el ministro.
Tawfiq, considerado uno de los principales ideólogos del islam marroquí, cree que este modelo tiene "una legitimidad política que el terrorismo trata de usurpar", por lo que es necesario insistir, dentro y fuera de Marruecos, en la pertinencia de la institución del Comendador de los Creyentes, en referencia a la autoridad religiosa del rey.
Los fundamentos de esta institución, que Tawfiq no duda en calificar como "modelo", son la garantía para el ciudadano de varios pilares vitales: seguridad y orden público, justicia, respeto por la propiedad privada y dignidad de la persona.
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