En un ambiente vecinal, que parece más de los pueblos del interior, se repite el iftar (desayuno) a las 21,00h, cena para los vecinos que no son musulmanes y por tanto no hacen el ayuno y que, a pesar de todo, celebran la llegada del mes del Ramadan con la mezquita.
A pie de calle, se organiza un iftar en la calle Méndez Núñez, enfrente de la sede de la Unión de Comunidades Islámicas de Valencia. Desde el mes de junio, se solicitó el permiso para preparar mesas enfrente de la sede para así poder compartir la rotura del ayuno con sus vecinos. Dentro de las actividades que desarrollan las mezquitas de la Unión de Comunidades Islámicas de Valencia, se encuentra el desayuno colectivo que se celebra todas las noches, especialmente para acompañar en la mesa a los que no se encuentran con sus seres queridos en un mes tan especial.
Aparte de los miembros de la comunidad, comparte la mesa Juan, Angel, María, Pilar, Manolo, Carmen, Antonio, Elvira y muchos más con sus hijos, mientras se sirva el desayuno (Iftar) se enlaza una conversación sobre la comida y su contenido, las religiones y también el deporte. Ángel, un vecino de 35 años, empieza a explicar a los demás vecinos que es el mes de Ramadan, porque se considera a sí mismo hijo de la mezquita a pesar que no comparta la religión.
En anteriores ocasiones, se sumó al desayuno el Imam Tarek AbdelBaset AbdelSamad, quién, recién llegado de Egipto, pasó unos días en España para recitar Qur’an en la mezquita. Cuando el Imam preguntó a los vecinos si había alguna molestia por el rezo de la noche en la sede, Pilar, una vecina de 60 años, con 5 hijos y 9 nietos contestó: “molestia ninguna, son vecinos de toda la vida. Además, gracias a la mezquita hoy me siento como cuando antiguamente cenábamos en el pueblo. Compartíamos la mesa en la calle, como una familia”. María, otra vecina que acudió con su marido y su hijo, añadió: “nunca hemos sentido ninguna molestia por la mezquita, todo lo contrario, son gente encantadora”, señalando a algunos miembros de la comunidad que compartían la mesa. En la mesa se mantuvo una charla amistosa vecinal entre todos. A la hora del café, Juan, el marido de María, pidió un ‘carajillo’ a modo de broma, añadiendo que él ya sabe de sobra que los musulmanes no beben alcohol. En el desayuno se pudo probar la chorba, típica en Argelia y la harira de Marruecos, junto con un plato de garbanzos, patata y carne. La multiculturalidad era patente: habían personas de Palestina, Argelia, Egipto, Siria, El Ecuador y de varios puntos de España.
Tras el desayuno, los vecinos, que entraron a conocer la mezquita por primera vez, quedaron muy agradados. Dentro, hicieron preguntas a las cuales se respondió gustosamente. Las cenas duran una hora y cuarto, un tiempo muy breve para el buen ambiente que se respiraba. Al despedirse siempre recuerdan repetir la velada durante este mes.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
A pie de calle, se organiza un iftar en la calle Méndez Núñez, enfrente de la sede de la Unión de Comunidades Islámicas de Valencia. Desde el mes de junio, se solicitó el permiso para preparar mesas enfrente de la sede para así poder compartir la rotura del ayuno con sus vecinos. Dentro de las actividades que desarrollan las mezquitas de la Unión de Comunidades Islámicas de Valencia, se encuentra el desayuno colectivo que se celebra todas las noches, especialmente para acompañar en la mesa a los que no se encuentran con sus seres queridos en un mes tan especial.
Aparte de los miembros de la comunidad, comparte la mesa Juan, Angel, María, Pilar, Manolo, Carmen, Antonio, Elvira y muchos más con sus hijos, mientras se sirva el desayuno (Iftar) se enlaza una conversación sobre la comida y su contenido, las religiones y también el deporte. Ángel, un vecino de 35 años, empieza a explicar a los demás vecinos que es el mes de Ramadan, porque se considera a sí mismo hijo de la mezquita a pesar que no comparta la religión.
En anteriores ocasiones, se sumó al desayuno el Imam Tarek AbdelBaset AbdelSamad, quién, recién llegado de Egipto, pasó unos días en España para recitar Qur’an en la mezquita. Cuando el Imam preguntó a los vecinos si había alguna molestia por el rezo de la noche en la sede, Pilar, una vecina de 60 años, con 5 hijos y 9 nietos contestó: “molestia ninguna, son vecinos de toda la vida. Además, gracias a la mezquita hoy me siento como cuando antiguamente cenábamos en el pueblo. Compartíamos la mesa en la calle, como una familia”. María, otra vecina que acudió con su marido y su hijo, añadió: “nunca hemos sentido ninguna molestia por la mezquita, todo lo contrario, son gente encantadora”, señalando a algunos miembros de la comunidad que compartían la mesa. En la mesa se mantuvo una charla amistosa vecinal entre todos. A la hora del café, Juan, el marido de María, pidió un ‘carajillo’ a modo de broma, añadiendo que él ya sabe de sobra que los musulmanes no beben alcohol. En el desayuno se pudo probar la chorba, típica en Argelia y la harira de Marruecos, junto con un plato de garbanzos, patata y carne. La multiculturalidad era patente: habían personas de Palestina, Argelia, Egipto, Siria, El Ecuador y de varios puntos de España.
Tras el desayuno, los vecinos, que entraron a conocer la mezquita por primera vez, quedaron muy agradados. Dentro, hicieron preguntas a las cuales se respondió gustosamente. Las cenas duran una hora y cuarto, un tiempo muy breve para el buen ambiente que se respiraba. Al despedirse siempre recuerdan repetir la velada durante este mes.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario