Beatriz Gascó y Miguel Barrachina, ayer en Segorbe. ana monleón
El PP pide que se retire como asignatura de religión en los colegios de Altura y Segorbe
La polémica está servida en el Alto Palancia. La decisión del Consell de implantar, de manera experimental, la docencia de la religión islámica en el colegio Virgen de Gracia de Altura y en el Pintor Camarón de Segorbe ha puesto a vecinos y grupos políticos de la comarca en alerta, con cruce de acusaciones entre defensores y detractores de la medida.
Un hecho que han cerciorado además las formaciones palantinos de izquierdas argumentando que fue el PP el que, en 2013, aprobó la Lomce que establece en su disposición transitoria segunda que «la enseñanza de otras religiones se ajustará a lo dispuesto en los acuerdos de cooperación celebrados por el Estado español con la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España, la Federación de Comunidades Israelitas de España, la Comisión Islámica de España y, en su caso, a los que en el futuro puedan suscribirse con otras confesiones religiosas», así como al acuerdo firmado en 1996 por los populares con la comunidad islámica.
Así las cosas, desde los distintos ámbitos comarcales, educativos e institucionales la sorpresa fue «mayúscula» tras conocer a principio de semana por prensa los centros en los que, supuestamente, el Consell querría comenzar a impartir, de cara al próximo curso, la religión islámica como opción y asignatura para los alumnos de varios centros escolares públicos de la provincia de Castelló. Una sorpresa que ha llevado durante los últimos días a un reguero de opiniones y manifestaciones políticas al respecto.
Los últimos en mostrar de nuevo su rechazo fue ayer el PP que, tras manifestar su absoluta repulsa al respecto nada más conocer la noticia, que tacharon de «nuevo experimento de Compromís y PSPV con la comarca del Alto Palancia» el pasado miércoles, la responsable del área de educación Beatriz Gascó, visitó Segorbe para anunciar que solicitarán en las Corts la paralización de la implantación de la religión islámica estos dos centros.
La popular explicó que se va a pedir además a la Conselleria que se muestren los informes y los criterios para elegir los centros a los que ha impuesto impartir el islam, tanto por las formas en que se ha «impuesto» en los equipos directivos de los centros escolares; como por «la opacidad» del procedimiento y por cuestiones estrictamente pedagógicas, alegando que con ello quieren «crear guetos concentrando en unos pocos colegios a toda la población similar».
Efecto llamada
También el presidente provincial Miguel Barrachina rechazó ayer esta iniciativa y afirmó que la enseñanza del islam acabará provocando un efecto llamada, alegando que «nuestra comarca tiene una riqueza limitada y si vienen muchos, otros se tendrán que ir». El popular se preguntó cómo puede ser que el Alto Palancia que representa solo el 5 % de la población de la provincia reúna el 50 % de las aulas de enseñanza islámica que se van a imponer a las comunidades educativas.
Por su parte, los alcaldes de los municipios señalados pidieron explicaciones al Consell al respecto de esta decisión que afirmaron desconocer. El PP de Segorbe fue el primero en mostrar su rechazo «por la hoja de ruta trazada por la izquierda que demuestra una vez más la infravaloración de la comarca del Alto Palancia».
Segorbe Participa, grupo integrante del equipo de gobierno, tachó de inadmisible cualquier enseñanza religiosa, lamentaron el oportunismo del PP, recordaron que la religión es un factor del ámbito privado de cada individuo e instaron a la separación de las religiones de las aulas, especialmente de las públicas instando a garantizar la laicidad, siendo la única que integra y no discrimina por razones de sexo o religión.
El PSPV comarcal explicó que no hay resolución firme sobre el tema y tacharon de oportunistas, irresponsables y de cierto tufo xenófobo las declaraciones del PP, utilizando estos temas que afectan a los sentimientos de las personas para generar polémica y poner en riesgo la convivencia si con ello consiguen algún rédito.
Los socialistas palantinos afirmaron aspirar a una sociedad basada en el laicismo como garantía de una democracia avanzada y cualquier religión, debe formar parte del ámbito privado de las personas, con lo que su enseñanza debe quedar fuera de la escuela pública. Por ello, apostillaron, los centros escolares públicos y los planes oficiales de estudio deben ajustarse a los principios constitucionales de aconfesionalidad propia del Estado laico, conforme a los cuales ninguna religión deberá formar parte del currículo y del horario escolar.
Desde EUPV, calificaron de actitud errática la intención de la Conselleria y mostraron su apoyo absoluto a la libertad de credo, de la misma forma que consideraron que dentro del ámbito educativo, la religión debe quedar totalmente excluida. Para EUPV la decisión parte de una falsa equidad y contraviene el principio constitucional de aconfesionalidad del estado y los principios de laicidad propios del siglo XXI.
También los comentarios de vecinos en las redes sociales no han hecho más que avivar la llama al respecto de un tema que está de candente actualidad, en el que no se han cortado en arremeter tintas contra políticos e instituciones por esta decisión en la que para la mayoría, la religión debería quedar al margen de un estado laico y aconfesional como es España.
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