Este fallo emitido ayer, ratifica el anterior, dictado por un tribunal de apelación en el marco de un proceso que se inició en 2002.
Según el fallo, las tres víctimas asesinadas en Srebrenica en 1995, se deben a que los cascos azules neerlandeses faltaron a sus obligaciones y pusieron en riesgo la vida de los vecinos. Mandaron a esos tres hombres fuera del campamento, a sabiendas de que al otro lado de la valla podían ser ejecutados.
Como demandantes en el juicio asistieron el sobreviviente de la matanza de Srebrenica, que perdió allí mismo a su hermano y su padre, y los parientes de un mecánico asesinado, igual que el resto, por la milicia serbobosnia según informó RT.
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