Un joven uigur en Calgary, Canadá, llora durante una marcha de protesta por la represión del partido comunista en Xinjiang. (Jerry Wu/La Gran Epoca)El partido comunista en China ha ingeniado un método para determinar quiénes ayunan en la región china de Xinjiang
Las autoridades chinas en la Provincia de Xinjiang, publicaron una advertencia anunciando que cualquier líder, o trabajador uigur, puede perder su trabajo si se descubre que no está almorzando durante el Ramadán.
Esto es parte de la campaña que las autoridades locales en Xinjiang, hogar del grupo étnico musulmán uigur, realizan para obligar a los uigures a desistir de sus rituales religiosos durante el mes de ayuno del Ramadán.
El Ramadán es un mes sagrado en el calendario islámico. Este año, comenzó el 22 de agosto y se requiere no comer durante el día.
“Los almuerzos, té y café gratis que se ofrecen en los departamentos gubernamentales y empresas - que las autoridades denominan: “atenciones del gobierno" o "provisiones de vida”- son en realidad una táctica utilizada para averiguar quién está ayunando” dijo Dilxat Raxit, vocero del Congreso Mundial Uigur, en una entrevista con La Gran Época.
Según Dilxat, en toda la provincia de Xinjiang se les obligó a los mandos del Partido Comunista Uigur, a firmar “cartas de responsabilidad”, prometiendo evitar el ayuno y otras actividades religiosas. Asimismo son responsables de hacer cumplir estas reglas en sus áreas asignadas, y reciben castigos si en éstas alguien ayuna.
“Por primera vez”, dijo Dilxat, “la represión se ha extendido a miembros retirados del partido comunista. A los funcionarios actuales se les requiere visitarles para impedir que participen del ayuno. Si alguien viola esta prohibición, se responsablilizará a los líderes locales, los que serán severamente castigados.”
Y agregó: “a los dueños de restaurantes musulmanes se les obliga a firmar un documento, el cual establece que durante el Ramadán deben permanecer abiertos y seguir vendiendo alcohol, o de lo contrario, sus licencias serán canceladas”.
Durante la entrevista, nos reveló que a los uigures detenidos durante las protestas de julio pasado en Urumqi, también se les prohíbe ayunar. Aquellos que insisten en hacerlo son alimentados a la fuerza con comida y agua, a la vez que se les insulta por su “mal comportamiento”.
Dilxat también nos manifestó, que a los monjes en las mezquitas se les obliga a predicar a otros que el ayuno es una "actividad feudal" y dañina para la salud. Si los monjes no obedecen, se cancela su certificado religioso.
Cuando se le preguntó sobre la reciente visita de Hu Jintao, líder del partido comunista chino (PCCh), a Xinjiang, Dilxat nos respondió: “La situación en Xinjiang aún no se normaliza. En lugar de pedirle a la gente han de la localidad, que respete la religión y cultura de la gente uigur, Hu alentó el uso de tropas militares para reprimir y restringir aún más nuestra libertad de religión. El régimen comunista suele hablar sobre ‘mantener la estabilidad’, pero lo que hacen, es siempre diferente de lo que dicen. En realidad son ellos los que están destruyendo la estabilidad”.
Un periodista de La Gran Época contactó a la Comisión Estatal de Asuntos Étnicos del PCCh, para constatar si las restricciones a las que Dilxat se refiere son oficiales, o en su defecto, para saber cuál era la posición oficial respecto al Ramadán. El responsable de medios no quizo hablar sobre el asunto, y en su lugar ofreció dos números telefónicos en Xinjiang, a los cuales el periodista podría llamar para obtener más información. Ambos números estaban continuamente ocupados, y cuando el periodisto contactó nuevamente a la Comisión Estatal de Asuntos Étnicos, la persona cortó la comunicación.
Sin embargo, las directivas aparecen en páginas de Internet oficiales de la región.
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