Un grupo de musulmanes celebra el Ramadán en el parque Rafalafena de la capital de la Plana. - MEDITERRÁNEO
La llegada de sudamericanos y musulmanes va al alza, mientras que la de rumanos desciende. Castellón mantiene saldo migratorio positivo tras los años de crisis y pérdida de habitantes foráneos
Castellón es, de nuevo, una provincia de oportunidades para los extranjeros, una etiqueta que perdió durante los años de crisis económica, pero que ha vuelto a recuperar. Lo acreditan las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) referentes a los movimientos migratorios del primer semestre del 2019, que arrojaron un saldo positivo --más llegadas que salidas-- respecto a la población foránea, con los sudamericanos como colectivo pujante y los rumanos a la baja,
En dicho periodo, llegaron a Castellón 3.270 extranjeros, esto es, unos 18 al día; y se fueron 1.659, una diferencia en positivo de 1.611 personas. Se afianzó de este modo una tendencia positiva que empezó levemente en el 2018, ya que desde el 2009 hasta el primer semestre del 2017 --con la excepción del segundo semestre del 2016--, la dinámica era de pérdida ininterrumpida de población de otros países, incluso pese a que la situación económica era bastante mejor.
sudamérica // Respecto al origen de los nuevos castellonenses, destaca la llegada de sudamericanos (947), que representan casi el 30% del total. Entre ellos hay una importante presencia de venezolanos (207), consecuencia directa de la inestabilidad política y social que vive ese país. Las dos nacionalidades con más implantación en la provincia, marroquí y rumana, marcan tendencias contrarias, ya que mientras la primera creció durante el primer trimestre del año pasado (495), la segunda fue a la baja (-397).
Juan Bautista Ferreres, profesor de la Universitat Jaume I especializado en análisis geográficos a nivel regional, cree que la pérdida de población rumana puede estar relacionada con la vuelta a casa de la primera generación que llegó, ya hace décadas, a Castellón. «De todos modos, ya hubo una pérdida considerable de población de este país durante los años de crisis», añade.
A medio y largo plazo, sin embargo, Ferreres no cree que esta tendencia de aumento de la población extranjera se vaya a agudizar: «Creo que la estadística tenderá a estabilizarse, con incrementos leves. Hay que recordar que la situación a nivel nacional es aún de inestabilidad y no se volverá a cifras de récord».
a la cabeza // La Comunitat Valenciana, según los datos del INE, es la tercera que más inmigrantes atrajo de toda España en el periodo estudiado, con un saldo migratorio de 27.162 personas. La autonomía se sitúa por detrás de Cataluña, con 47.119 personas, y la Comunidad de Madrid (40.539). Por el contrario, la que menos saldo migratorio registró fue Extremadura (976).
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