El proyecto "Crímenes de Odio: Memoria de 25 años de olvido", que recoge un mapa histórico y documental de los casos que se registraron en España entre 1990 y 2015, denuncia que en España hay 10.000 delitos de odio al año.
Aunque el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, contabilizó 1.285 delitos de odio en el año 2014, el co-autor del proyecto, David Bou, ha puntualizado que desde la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) mantienen que sólo se denuncian un diez por ciento de los casos, por lo que estiman que actualmente hay 10.000 crímenes de odio en España.
El periodista David Bou ha explicado a Efe que los objetivos principales del proyecto son "dignificar la memoria de las víctimas silenciadas en España en estos últimos 25 años" y "evidenciar la falta de trabajo por parte del Estado y de las instituciones".
En el proyecto "Crímenes de Odio: Memoria de 25 años de olvido", liderado por David Bou y Miquel Ramos, han detectado un aumento de delitos de odio promovidos por la islamofobia, ataques que se han materializado tanto en centros de culto como en agresiones directas a personas individuales.
David Bou ha destacado que la porofobia (odio a los pobres) es la segunda categoría con más delitos en España, y ha señalado que es el grupo social más vulnerable de todos: "al tratarse de personas sin vínculos sociales o familiares, en muchas ocasiones no hemos podido encontrar ni sus nombres o apellidos".
El co-autor del proyecto ha relatado que, al tratarse de una investigación abierta, no han podido acceder a la base de datos policiales y judiciales, por lo que se han basado en la hemeroteca de los medios de comunicación.
Durante el proceso de la investigación, que actualmente ha contabilizado 88 víctimas, los autores han detectado que "no hay un trabajo periodístico suficientemente extenso para obtener la información sobre la resolución de muchos de los casos", y ha puntualizado que en 42 de los casos se desconoce si hubo sentencia.
Al tratarse de una investigación abierta, David Bou ha afirmado que "las personas que echen en falta algún caso podrán contactar con nosotros y ayudar a que la investigación sea más fidedigna".
David Bou ha explicado que España ha empezado a implementar las fiscalías de delitos de odio en Málaga, Madrid y Bilbao, departamentos que ya existían en Barcelona desde el 2009, y ha añadido que desde hace dos años se han empezado a sistematizar los datos de denuncia.
El co-autor ha relatado que el Ayuntamiento de Valencia ha sido pionero en fomentar un programa de formación de policía municipal en materia de delitos de odio, y ha destacado que el Ayuntamiento de Madrid también se ha sumado a la iniciativa.
Pese a los progresos, la abogada penalista Laia Serra ha denunciado "la falta de herramientas y de jurisdicción que puedan abordar los delitos de odio de forma eficiente" y ha subrayado que "la falta de voluntad política y judicial para profundizar en estos casos".
David Bou ha señalado que no hay una ley integral que proteja y ampare a las víctimas tanto a nivel psicológico como a nivel de indemnización, y de reparación del daño sufrido.
El proyecto se ha presentado hoy en una rueda de prensa en el Colegio de Periodistas de Barcelona en la que también han participado el presidente del Movimiento Contra la Intolerancia, Esteban Ibarra; el portavoz del Front d'Alliberament Gai de Catalunya y presidente del Observatorio contra la Homofobia, Eugeni Rodríguez; Laia Serra y el sociólogo de SOS Racismo Cataluña Edo Bazzaco.
El acto también ha contado con Mavi Muñoz, la madre de Carlos Palomino, joven que murió asesinado por causas ideológicas el año 2007 en Madrid en manos de un militar neonazi, Josué Estébanez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario