El músico de origen iraní Kaveh Kholardi lanzó un improperio contra la comunidad judía durante una actuación en Oslo, aunque acto seguido dijo que se trataba de una broma.
La Policía de Noruega considera que los insultos proferidos por el rapero musulmán noruego de origen iraní Kaveh Kholardi contra el colectivo judío durante un concierto celebrado el verano pasado en el festival de Haugen de Oslo no son racistas ni antisemitas ni tampoco incitan al odio, informó este jueves el diario Dagen.
Durante esa actuación, Kaveh, de 23 años, felicitó a los musulmanes por el final del Ramadán, para acto seguido preguntar si había cristianos o judíos entre el público. Fue entonces cuando espetó un "Que le jodan a los judíos", aunque tras una breve pausa aseguró que se trataba de una broma, lo cual no evitó que su improperio provocara rechazo tanto por parte de los asistentes como de los organizadores del evento.
Las autoridades alegan ahora que no hay motivos para inculpar al cantante, por lo que decidieron cerrar el caso. "La manera en cómo fue formulado se incluye dentro de la libertad de expresión artística con la que los artistas disfrutan al hacer declaraciones provocativas o satíricas", explicó la Policía, citada por el medio noruego.
El joven cantante, que compuso la canción oficial de Noruega para los JJ.OO. de Invierno de Sochi 2014, asegura que sus palabras fueron sacadas de contexto y malinterpretadas. "No soy racista, no odio a los judíos", aseveró.
No obstante, varias personas han mostrado su desacuerdo con la decisión policiales. Entre ellas se encuentra Ervin Kohn, dirigente de una organización contra el racismo, que aseguró que apelará el caso ante el fiscal general con la intención de llevar al rapero a los tribunales.
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