MADRID.09 de febrero de 2008,ABC,C.H./M.C.
Para el Partido Popular, el velo islámico es «un símbolo que manifiesta una sumisión y discriminación de la mujer en la sociedad». A partir de ahí, el equipo de campaña del PP se ha puesto en marcha para incluir en el programa electoral la regulación del uso del velo, que supondrá su prohibición en las escuelas y otros ámbitos de la sociedad, pero con excepciones importantes.
El coordinador del programa electoral, Juan Costa, intentó explicar ayer cómo se plasmará esta controvertida cuestión en un texto legal. El principio general parece claro: establecer la limitación de símbolos que sugieran discriminación o sumisión de la mujer.
Dicho esto, explicó Costa, «los centros educativos sí pueden tener derecho a aceptar la entrada del velo en las escuelas en función de la realidad local», pero esta aludida realidad local sólo hace referencia a los territorios de Ceuta y Melilla, dado que su uso es una «costumbre generalizada» y no se considera un «signo de sumisión o de discriminación» de la mujer.
«Constitucionalidad»
Fuentes del primer partido de la oposición explicaron a ABC que «hay fundamento de constitucionalidad» en una norma que establecería excepciones en función del territorio. En cuanto a si atentaría al principio de igualdad de todos los españoles, consagrado en la Carta Magna, comentaron que es «perfectamente posible que prime otro bien constitucional sobre el de la igualdad» en relación con «una práctica inveterada, secular, de convivencia que es el uso del velo en Ceuta y Melilla».
Los mismos medios consultados indicaron que no habría más excepciones «salvo que en alguna otra parte se diera una circunstancia constitucional fuerte y, ahora, la verdad, no se me ocurre ninguna».
Además, ni la Comunidad Autónoma correspondiente ni el Gobierno de la Nación podrán obligar a que se admita a una alumna con velo. Los populares criticaron recientemente a la Generalitat de Cataluña por obligar a un colegio de Gerona a readmitir a una niña que lleva esa prenda islámica.
Otra de las propuestas novedosas del PP en materia de inmigración es la de crear un sistema de visados y permisos para la entrada legal en España por la cual los extranjeros concursarán en un sistema de puntos que serán otorgados en función de las circunstancias que favorezcan su integración.
En este sentido, Costa, que ayer presentó en rueda de prensa las líneas generales del programa electoral con que los populares concurrirán a las elecciones del próximo 9 de marzo, destacó que se trata de dar prioridad y preferencia a una serie de trabajadores con alto nivel de cualificación profesional que, además, sean necesarios para ocupar puestos de trabajo en sectores importantes para la economía española o en aquellos que están necesitados de trabajadores, como empieza a pasar ahora mismo en el sector sanitario con la construcción de nuevos hospitales en muchas Comunidades.
Además del «Contrato de integración» ya conocido -que sería suscrito por todo inmigrante en la primer renovación del permiso de residencia y trabajo-, el PP promoverá, de ganar las elecciones, un programa especial para «la segunda generación» de inmigrantes, especialmente para aquellos que llegan a nuestro país después de sus padres y que suelen tener bastantes problemas de integración.
La escalada verbal del Gobierno socialista contra el PP por sus propuestas de los últimos días sobre inmigración y la regulación del velo subió ayer varios peldaños más. La vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, volvió a utilizar la tribuna del Consejo de Ministros para criticar las propuestas electorales de los populares. Calificó al PP de «absolutamente irresponsable» por «crear un problema donde no lo hay, con los inmigrantes y con el velo».
«Falta de tolerancia»
El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, se apuntó a las críticas contra Rajoy, porque en su región el uso de velo, según dijo, «no ha planteado ningún problema». Y como nadie se ha quejado, al parecer, cree que su prohibición supondría «una falta de tolerancia» por parte del PP.
En el lado contrario, la Unión Democrática de Estudiantes (UDE) defendió la propuesta de Mariano Rajoy, de prohibir el velo en los centros educativos y apostó por la creación de un código de vestuario en las escuelas públicas que garantice la igualdad entre los estudiantes, según informa la agencia Servimedia.
Las reacciones se multiplicaron ayer. El presidente de la Unión de Comunidades Islámicas en España, Riay Tatary, rechazó la propuesta del PP «porque España es un Estado aconfesional» y alertó de que «algunas declaraciones electoralistas pueden crear un foco de islamofobia».
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
Para el Partido Popular, el velo islámico es «un símbolo que manifiesta una sumisión y discriminación de la mujer en la sociedad». A partir de ahí, el equipo de campaña del PP se ha puesto en marcha para incluir en el programa electoral la regulación del uso del velo, que supondrá su prohibición en las escuelas y otros ámbitos de la sociedad, pero con excepciones importantes.
El coordinador del programa electoral, Juan Costa, intentó explicar ayer cómo se plasmará esta controvertida cuestión en un texto legal. El principio general parece claro: establecer la limitación de símbolos que sugieran discriminación o sumisión de la mujer.
Dicho esto, explicó Costa, «los centros educativos sí pueden tener derecho a aceptar la entrada del velo en las escuelas en función de la realidad local», pero esta aludida realidad local sólo hace referencia a los territorios de Ceuta y Melilla, dado que su uso es una «costumbre generalizada» y no se considera un «signo de sumisión o de discriminación» de la mujer.
«Constitucionalidad»
Fuentes del primer partido de la oposición explicaron a ABC que «hay fundamento de constitucionalidad» en una norma que establecería excepciones en función del territorio. En cuanto a si atentaría al principio de igualdad de todos los españoles, consagrado en la Carta Magna, comentaron que es «perfectamente posible que prime otro bien constitucional sobre el de la igualdad» en relación con «una práctica inveterada, secular, de convivencia que es el uso del velo en Ceuta y Melilla».
Los mismos medios consultados indicaron que no habría más excepciones «salvo que en alguna otra parte se diera una circunstancia constitucional fuerte y, ahora, la verdad, no se me ocurre ninguna».
Además, ni la Comunidad Autónoma correspondiente ni el Gobierno de la Nación podrán obligar a que se admita a una alumna con velo. Los populares criticaron recientemente a la Generalitat de Cataluña por obligar a un colegio de Gerona a readmitir a una niña que lleva esa prenda islámica.
Otra de las propuestas novedosas del PP en materia de inmigración es la de crear un sistema de visados y permisos para la entrada legal en España por la cual los extranjeros concursarán en un sistema de puntos que serán otorgados en función de las circunstancias que favorezcan su integración.
En este sentido, Costa, que ayer presentó en rueda de prensa las líneas generales del programa electoral con que los populares concurrirán a las elecciones del próximo 9 de marzo, destacó que se trata de dar prioridad y preferencia a una serie de trabajadores con alto nivel de cualificación profesional que, además, sean necesarios para ocupar puestos de trabajo en sectores importantes para la economía española o en aquellos que están necesitados de trabajadores, como empieza a pasar ahora mismo en el sector sanitario con la construcción de nuevos hospitales en muchas Comunidades.
Además del «Contrato de integración» ya conocido -que sería suscrito por todo inmigrante en la primer renovación del permiso de residencia y trabajo-, el PP promoverá, de ganar las elecciones, un programa especial para «la segunda generación» de inmigrantes, especialmente para aquellos que llegan a nuestro país después de sus padres y que suelen tener bastantes problemas de integración.
La escalada verbal del Gobierno socialista contra el PP por sus propuestas de los últimos días sobre inmigración y la regulación del velo subió ayer varios peldaños más. La vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, volvió a utilizar la tribuna del Consejo de Ministros para criticar las propuestas electorales de los populares. Calificó al PP de «absolutamente irresponsable» por «crear un problema donde no lo hay, con los inmigrantes y con el velo».
«Falta de tolerancia»
El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, se apuntó a las críticas contra Rajoy, porque en su región el uso de velo, según dijo, «no ha planteado ningún problema». Y como nadie se ha quejado, al parecer, cree que su prohibición supondría «una falta de tolerancia» por parte del PP.
En el lado contrario, la Unión Democrática de Estudiantes (UDE) defendió la propuesta de Mariano Rajoy, de prohibir el velo en los centros educativos y apostó por la creación de un código de vestuario en las escuelas públicas que garantice la igualdad entre los estudiantes, según informa la agencia Servimedia.
Las reacciones se multiplicaron ayer. El presidente de la Unión de Comunidades Islámicas en España, Riay Tatary, rechazó la propuesta del PP «porque España es un Estado aconfesional» y alertó de que «algunas declaraciones electoralistas pueden crear un foco de islamofobia».
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