Ibiza , 16 de septiembre de 2007,Última Hora , C. A.
El sindicato USO se quejó ayer de la situación laboral de la comunidad musulmana en el mes de Ramadán ante «la falta de sensibilidad» de algunos empresarios, sobre todo del sector de la construcción que no facilitan a los trabajadores musulmanes, sobre todo de procedencia marroquí y solteros, que puedan disfrutar de una reducción de la jornada laboral, que recuperaran posteriormente, en su fiesta religiosa.
Jamal Akkad, responsable del departamento de Inmigración del sindicato, aseguró que «muchos de los trabajadores musulmanes desconocen que tienen este derecho a estas horas que son recuperables, hay una ley que los ampara».
Reclama, en este sentido, más sensibilidad a los empresarios ante esta situación ya que les deniega ese derecho. «Trabajan diez horas al día en verano. La jornada es mortal ya que se ha de trabajar al sol y qué menos que sean sensibles. Les piden ir dos horas antes pero no quieren. Rinden menos porqué están sin comer y sin beber». Asegura que «hay muchos factores humanos a tener en cuenta» en la celebración del Ramadán. El Ramadán contempla que el musulman no puede ingerir bocado ni beber ni mantener relaciones sexuales desde las cuatro de la madrugada hasta que se pone el sol. Los rezos son cinco veces al día y el viernes es su fiesta religiosa.
«El viernes es para los musulmanes como el domingo para los católicos que acuden a misa», subraya Akkad acerca de esta fiesta religiosa. USO asegura que los trabajadores musulmanes de la construcción cuentan con el apoyo de sus compañeros, sobre todo los jóvenes, «pero no dicen nada por temor a perder sus trabajos ya que vienen de otros gremios». No obstante, el problema no es generalizado ya que otros empresarios como la hostelería no ponen trabas. «A una chica que trabaja en la hostelería su jefe se ofreció para reemplazarla y ella pudiera cumplir con el Ramadán», señaló.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
El sindicato USO se quejó ayer de la situación laboral de la comunidad musulmana en el mes de Ramadán ante «la falta de sensibilidad» de algunos empresarios, sobre todo del sector de la construcción que no facilitan a los trabajadores musulmanes, sobre todo de procedencia marroquí y solteros, que puedan disfrutar de una reducción de la jornada laboral, que recuperaran posteriormente, en su fiesta religiosa.
Jamal Akkad, responsable del departamento de Inmigración del sindicato, aseguró que «muchos de los trabajadores musulmanes desconocen que tienen este derecho a estas horas que son recuperables, hay una ley que los ampara».
Reclama, en este sentido, más sensibilidad a los empresarios ante esta situación ya que les deniega ese derecho. «Trabajan diez horas al día en verano. La jornada es mortal ya que se ha de trabajar al sol y qué menos que sean sensibles. Les piden ir dos horas antes pero no quieren. Rinden menos porqué están sin comer y sin beber». Asegura que «hay muchos factores humanos a tener en cuenta» en la celebración del Ramadán. El Ramadán contempla que el musulman no puede ingerir bocado ni beber ni mantener relaciones sexuales desde las cuatro de la madrugada hasta que se pone el sol. Los rezos son cinco veces al día y el viernes es su fiesta religiosa.
«El viernes es para los musulmanes como el domingo para los católicos que acuden a misa», subraya Akkad acerca de esta fiesta religiosa. USO asegura que los trabajadores musulmanes de la construcción cuentan con el apoyo de sus compañeros, sobre todo los jóvenes, «pero no dicen nada por temor a perder sus trabajos ya que vienen de otros gremios». No obstante, el problema no es generalizado ya que otros empresarios como la hostelería no ponen trabas. «A una chica que trabaja en la hostelería su jefe se ofreció para reemplazarla y ella pudiera cumplir con el Ramadán», señaló.
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