Los musulmanes de Melilla no podrán pasar desde Marruecos los 6.000 borregos de su fiesta grande por la fiebre aftosa

MELILLA| 03/03/2016,EUROPA PRESS 

Los musulmanes melillenses no podrán ni este año 2016 ni en 2017 pasar borregos desde Marruecos a Melilla, una media anual de 6.000, para celebrar la pascua grande islámica consistente en el sacrificio de un cordero por familia, debido a la prohibición impuesta por el Gobierno de la Nación dado el brote de fiebre aftosa que se ha detectado en el reino alauí.

Según ha informado este jueves la vicepresidente segunda de la Ciudad Autónoma y consejera de Presidencia de Melilla, Paz Velázquez (PPL) tras reunirse con el delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, éste le ha comunicado formalmente "que este año y el siguiente no podrán traerse borregos de Marruecos a Melilla debido al brote de fiebre aftosa".

A raíz de este anuncio, Paz Velázquez ha asegurado que este impedimento, establecido a nivel nacional, "se debe a un motivo exclusivamente sanitario, el cual no queremos que afecte a las tradiciones de la comunidad musulmana de nuestra ciudad".

BORREGOS DE LA PENÍNSULA

Por ello, ha avanzado que desde la Consejería de Presidencia y Salud Pública "estamos trabajando para que antes de septiembre tengamos en Melilla el suficiente número de borregos (traídos desde la Península) que cumplan con la totalidad de los requisitos establecidos por el Islam y las normativas sanitarias y, de este modo, los musulmanes melillenses puedan continuar celebrando sus tradiciones con total naturalidad".

Para lograrlo, la titular de Presidencia está trabajando con todos los interesados, y por ello este jueves Paz Velázquez y la directora general de Salud Pública, Celia Bueno, se han reunido en la sede de la Dirección General de Sanidad y Consumo (DGSC) con responsables de la Comisión Islámica de Melilla, de las ganaderías melillenses, del Colegio de Veterinarios y técnicos de la Dirección General de Sanidad y Consumo.

Paz Velázquez ha manifestado que "esta reunión ha sido la primera, pero no la última", puesto que la consejera espera poder reunirse con todas las entidades, colectivos e instituciones, tanto locales como nacionales, "que puedan resultar afectados o interesados".