Los restos quedarán integrados en el centro de interpretación de la Mezquita del Palacio Episcopal
Las obras en el patio de carruajes del Palacio Episcopal han dejado al descubierto las enormes letrinas del edificio anterior a las instalaciones del Obispado de la Iglesia. En ese lugar se ubicó durante siglos el Alcázar Califal, sede del poder en Al Andalus en su condición de lugar del trono. Y donde los poderosos ponen sus posaderas ya se sabe que no se admiten bromas.
Los arqueólogos habían hallado los baños que son perfectamente visitables en la zona del Campo Santo de los Mártires. Pero baño en aquella y esta época tenían acepciones distintas. Los baños que se pueden ver se excavaron en 1903 por primera vez, son de época almohade y responden a los usos de tomar las aguas. Constan de una sala fría, una templada y una caliente. Se encontraban dentro del recinto pero tenían una función recreativa.
El nuevo hallazo no es un baño al estilo de tomar las aguas. Es literalmente el cuarto de baño, el lugar donde se accede para evacuar aguas mayores y menores. Y lo que se ve en las imágenes es una construcción de gran porte, compuesta de enormes sillares y que tiene todavía la decoración de las paredes. No era un aseo normal. Era un auténtico water palaciego.
Los restos están en estos momentos en excavación por un equipo de expertos. Todo ello se pretende integrar en el futuro centro de interpretación de la Mezquita-Catedral que se levantará en torno al patio de carruajes del Palacio Episcopal. El proyecto, fruto de una larguísima polémica, ha permitido una invetigación a fondo de un espacio de enorme relevancia para la ciudad de Córdoba.
El proyecto está siendo financiado por el Cabildo con el objetivo de disponer de un espacio de atención a los visitantes del principal monumento aprovechando espacios en desuso de las propiedades de la Iglesia.
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