Inmueble de A Baiuca que acogerá el centro cultural y de oración. / l. o.La agrupación islámica acometerá algunas reformas en sus nuevas instalaciones para poder abrirlas en marzo . Algunos residentes en la zona amenazan con protestas contra el traslado
"Vamos a seguir utilizando el local para nuestras fiestas y reuniones". El vicepresidente de la comunidad de la mezquita Abou Baker, Mohamed Benkaddour, ha anunciado que, finalmente, sí prolongarán el contrato de arrendamiento del local que acogió durante diez años su mezquita.
Y lo harán pese a la frontal oposición de ciertos vecinos de O Alto de Arteixo que propiciaron con sus denuncias el cierre de la templo por las supuestas molestias y riesgos derivados del uso de este bajo de la calle de O Castro como lugar de oración. "Ya no será una lugar de rezo", matiza Benkaddour.
El portavoz del colectivo, que es a su vez presidente de la asociación de inmigrantes del Magreb -Aimate-, reconoce que el local no se adaptaba a los usos religiosos, como criticaban algunos de los residentes en O Alto de Arteixo y ratificó un informe urbanístico. "Tendríamos que modificar la entreplanta, pero no tenemos pensado hacer reformas. Lo que queremos es que lo utilicen las mujeres para sus actividades", explica.
Su decisión de conservar el local se da a conocer sólo un día después de que el colectivo islámico cerrase el acuerdo de compra-venta del inmueble en el que instalarán la nueva mezquita. La comunidad Abou Baker ha adquirido finalmente la vivienda unifamiliar de A Baiuca, un edificio de dos plantas y sótano de 220 metros cuadrados en el que tienen previsto instalar su centro cultural y religioso.
El colectivo confía en que la nueva mezquita abrirá sus puertas en el plazo de un mes. "Antes tenemos que hacer ciertas reformas", explica. No será solo un lugar de rezo. "Haremos actividades, reuniones...". Entre las iniciativas que pondrán en marcha, varias tienen por objeto promover la interculturalidad. Será a través de clases de árabe para españoles, cursos de informática y diversos talleres. La comunidad anima a todos los vecinos a participar e insiste en que no tiene "la menor intención de molestar a nadie".
Todo apunta a que su invitación será rechazada. Al menos, por los residentes en las viviendas más próximas a la nueva sede de la comunidad Abou Baker. Los "temores" ante los "rumores fundados" del traslado de la mezquita en a A Baiuca han dado paso a un rotundo rechazo a su apertura entre los vecinos y comerciantes próximos.
La comunidad de propietarios de los inmuebles 230 y 232 de la Travesía de Arteixo entregó la pasada semana en el Ayuntamiento 150 firmas contra la compra de la vivienda por parte del colectivo musulmán. "Ya tenemos doscientas más", asegura ahora el promotor de la campaña
Este grupo de vecinos exige al Concello que no autorice "la utilización de la casa como mezquita". "No es nada racista", asegura el portavoz, que añade: "Pero es que esta gente no sabe convivir, quiere acaparar con todo y van a masificar esta zona". Este residente asegura que su petición se fundamenta en los problemas de tráfico que, vaticina, seguirán a la apertura del centro cultural musulmán. "Es una zona de gran circulación de vehículos, pero de calzadas estrechas y escasos aparcamientos", sostenían ya en el escrito que remitieron al Concello.
"Mandamos las firmas como advertencia, ahora que les han vendido la casa ya no nos queda otra: denuncias, denuncias y más denuncias si vemos que no se ajusta a la legalidad", advierten los residentes, que ya estudian otras opciones. "Si hay que hacer una manifestación, se hace...". Los residentes creen que hay otros lugares más idóneos para la instalación de una mezquita. "Si la montan en A Penouqueira -un monte de Arteixo en la parte alta de A Baiuca-, pues fenómeno".
El promotor de la recogida de firmas centró sus críticas en la alcaldesa, Pilar Souto. Asegura que la regidora local permitió que la mezquita permaneciese abierta en situación irregular. "Le han puesto una denuncia por eso", sostiene.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
"Vamos a seguir utilizando el local para nuestras fiestas y reuniones". El vicepresidente de la comunidad de la mezquita Abou Baker, Mohamed Benkaddour, ha anunciado que, finalmente, sí prolongarán el contrato de arrendamiento del local que acogió durante diez años su mezquita.
Y lo harán pese a la frontal oposición de ciertos vecinos de O Alto de Arteixo que propiciaron con sus denuncias el cierre de la templo por las supuestas molestias y riesgos derivados del uso de este bajo de la calle de O Castro como lugar de oración. "Ya no será una lugar de rezo", matiza Benkaddour.
El portavoz del colectivo, que es a su vez presidente de la asociación de inmigrantes del Magreb -Aimate-, reconoce que el local no se adaptaba a los usos religiosos, como criticaban algunos de los residentes en O Alto de Arteixo y ratificó un informe urbanístico. "Tendríamos que modificar la entreplanta, pero no tenemos pensado hacer reformas. Lo que queremos es que lo utilicen las mujeres para sus actividades", explica.
Su decisión de conservar el local se da a conocer sólo un día después de que el colectivo islámico cerrase el acuerdo de compra-venta del inmueble en el que instalarán la nueva mezquita. La comunidad Abou Baker ha adquirido finalmente la vivienda unifamiliar de A Baiuca, un edificio de dos plantas y sótano de 220 metros cuadrados en el que tienen previsto instalar su centro cultural y religioso.
El colectivo confía en que la nueva mezquita abrirá sus puertas en el plazo de un mes. "Antes tenemos que hacer ciertas reformas", explica. No será solo un lugar de rezo. "Haremos actividades, reuniones...". Entre las iniciativas que pondrán en marcha, varias tienen por objeto promover la interculturalidad. Será a través de clases de árabe para españoles, cursos de informática y diversos talleres. La comunidad anima a todos los vecinos a participar e insiste en que no tiene "la menor intención de molestar a nadie".
Todo apunta a que su invitación será rechazada. Al menos, por los residentes en las viviendas más próximas a la nueva sede de la comunidad Abou Baker. Los "temores" ante los "rumores fundados" del traslado de la mezquita en a A Baiuca han dado paso a un rotundo rechazo a su apertura entre los vecinos y comerciantes próximos.
La comunidad de propietarios de los inmuebles 230 y 232 de la Travesía de Arteixo entregó la pasada semana en el Ayuntamiento 150 firmas contra la compra de la vivienda por parte del colectivo musulmán. "Ya tenemos doscientas más", asegura ahora el promotor de la campaña
Este grupo de vecinos exige al Concello que no autorice "la utilización de la casa como mezquita". "No es nada racista", asegura el portavoz, que añade: "Pero es que esta gente no sabe convivir, quiere acaparar con todo y van a masificar esta zona". Este residente asegura que su petición se fundamenta en los problemas de tráfico que, vaticina, seguirán a la apertura del centro cultural musulmán. "Es una zona de gran circulación de vehículos, pero de calzadas estrechas y escasos aparcamientos", sostenían ya en el escrito que remitieron al Concello.
"Mandamos las firmas como advertencia, ahora que les han vendido la casa ya no nos queda otra: denuncias, denuncias y más denuncias si vemos que no se ajusta a la legalidad", advierten los residentes, que ya estudian otras opciones. "Si hay que hacer una manifestación, se hace...". Los residentes creen que hay otros lugares más idóneos para la instalación de una mezquita. "Si la montan en A Penouqueira -un monte de Arteixo en la parte alta de A Baiuca-, pues fenómeno".
El promotor de la recogida de firmas centró sus críticas en la alcaldesa, Pilar Souto. Asegura que la regidora local permitió que la mezquita permaneciese abierta en situación irregular. "Le han puesto una denuncia por eso", sostiene.
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