Turquía,03-10-2017,Hispanatolia
El hallazgo de miniaturas de carros, sonajeros, muñecas y otros juguetes permite saber con qué jugaban los niños de hace miles de años a los arqueólogos, y constatar que la mentalidad humana era la misma entonces que ahora.
Un equipo de arqueólogos turcos ha desenterrado en la provincia de Şanlıurfa, en el sureste de Turquía, un juguete que representa un carro de guerra y con el que se cree que jugaban los niños de hace 5.000 años.
El juguete fue hallado enterrado en la tumba de un niño ubicada en la antigua ciudad de Sumatar, situada a unos 60 kilómetros al sureste de la ciudad de Şanlıurfa y donde se dice que el profeta Moisés vivió antes del iniciar el Éxodo. En el enterramiento se halló también lo que parece ser un antiguo sonajero, igualmente usado por los niños de la época.
Celal Uludağ, quien dirige las excavaciones arqueológicas en Sumatar, explicó a los medios que el juguete con forma de carro estaba fabricado en barro y se remonta a la Edad del Bronce, y probablemente fue fabricado para el hijo de un monarca o para un funcionario de alto rango de la época. “El carro muestra con qué jugaban los niños en aquellos tiempos, y el sentido de la estética en esa época”, dijo Uludağ.
Por su parte el profesor Yusuf Albayrak explicó que desde el inicio de las excavaciones en el lugar hace cinco años se han descubierto unas 120 tumbas en la roca, siguiendo la costumbre de los enterramientos en aquella época. “Hemos desenterrado 45 tumbas hasta ahora, y fue en una de esas tumbas donde una pequeña réplica del carro y un sonajero con motivos de pájaros fueron hallados. Era una costumbre durante esa época enterrar a los niños con sus juguetes cuando morían. Esto supone un interesante hallazgo para nosotros, porque indica que los sonajeros para niños existían incluso hace 5.000 años”, subrayó el académico turco.
Recientemente las excavaciones arqueológicas en otro lugar a un millar de kilómetros de distancia, en la antigua ciudad de Pario localizada a las afueras de la aldea de Kemer (en la provincia noroccidental de Çanakkale), han descubierto también juguetes en las tumbas de niños que se remontan en este caso a unos 2.000 años de antigüedad.
Los hallazgos en Pario, que constituyó uno de los puertos comerciales más importantes durante el período helenístico, destacan porque se ha constatado que mientras que en las tumbas de las niñas se depositaban muñecas, en las de los niños aparecen figuras masculinas, lo que para los expertos refleja que pese a las diferencias estéticas que puedan darse en los objetos con el paso de los siglos, la mentalidad humana era la misma hace miles de años.
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