El Ayuntamiento y la comunidad musulmana acuerdan el emplazamiento, que fue rechazado inicialmente
El solar donde se ha acordado hacer mezquita y un aparcamiento público de uso preferente para los fieles musulmanes.
El solar donde se ha acordado hacer mezquita y un aparcamiento público de uso preferente para los fieles musulmanes. aniol esclusa
El equipo de gobierno de Palafrugell y la comunidad musulmana local han acordado que la mezquita se ubique detrás del parque de bomberos, en la zona industrial, en unos terrenos municipales. Este debería ser el emplazamiento definitivo después de que el del lado de la estación de autobuses quedara descartado porque uno de los particulares que tenía que vender la parcela para desarrollar el proyecto, el concejal Fredreric Prats (CiU), renunciase por la presión de la oposición y, especialmente, del grupo municipal de Izquierda. Los republicanos pusieron en duda la implicación del edil en el proyecto como representante público, asesor desinteresado de la comunidad en asuntos arquitectónicos y propietario de uno de los terrenos. Izquierda apuntaba que con todos estos elementos aglutinados en la figura de Prats se podía producir un caso de prevaricación. El concejal de CiU rechazó la venta de su terreno para "acabar con posibles malas interpretaciones". ERC manifestó ayer su acuerdo total con la nueva ubicación.
El espacio que debe acoger la mezquita y centro sociocultural está situado en la calle de la Industria y hace esquina con la calle Tref. La parcela que se deberá construir el equipamiento islámico es de 1.500 metros cuadrados. Al lado, hay otro espacio de 900 metros cuadrados donde el Ayuntamiento hará un aparcamiento público, pero con preferencia para los fieles musulmanes, concretó ayer el alcalde, Julio Fernández (PSC). El alcalde ha añadido que los terrenos del centro de la villa tenían una superficie conjunta de 700 metros cuadrados, por lo que la comunidad dispondrá de más espacio. Sobre el aspecto de la edificación, Fernández concretó que podrá tener la forma que los promotores del centro de culto deseen, si bien añadió que "no quieren hacer una obra faraónica".
En cuanto al dinero que la comunidad pagó al Ayuntamiento por las dos parcelas • las del proyecto inicial (146.894,30 euros), el alcalde precisó que los musulmanes pueden anula • lar la operación de compra, de manera que el Ayuntamiento los debería devolver el dinero; o, por el contrario, pueden hacer una permuta entre los terrenos. Fernández añadió que, en todo caso, la comunidad no tendrá que añadir dinero ya que el valor del suelo era diferente: el del centro de la localidad tiene calificación de suelo urbano, mientras que el del polígono es de equipamiento privado.
Esta calificación ha hecho que la comunidad accediera a hacer la mezquita en estos terrenos, donde unos meses atrás lo rechazó. Entonces, la calificación que tenían los terrenos sólo permitía la cesión del espacio por 50 años, al final de los cuales todo lo que hubiera volvería a ser propiedad del Ayuntamiento. Ahora, con la calificación de equipamiento privado, el Ayuntamiento puede vender la parcela.
En todo caso, la licencia urbanística para la construcción del centro no podrá ser solicitada hasta la finalización de la tramitación del POUM. Esta licencia va ligada a otra licencia específica de actividades para uso religioso. En este aspecto, pues, no habrá ningún retraso respecto de la anterior ubicación.
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