Imagen de archivo de una docente de Religión Islámica. / R. G.
La parlamentaria María José Piñero plantea en el Parlamento cómo se financia la impartición de esta asignatura
La diputada del grupo parlamentario Vox en Andalucía María José Piñero ha registrado varias preguntas en el Parlamento andaluz en referentes a la impartición de la asignatura de Religión Islámica en los centros educativos de la provincia de Granada. Las preguntas, formuladas para su respuesta escrita con el consejo de Gobierno, plantean varias cuestiones. La primera es en cuántos centros educativos se está impartiendo esta asignatura en la provincia de Granada y “cuáles son dichos centros”.
En su exposición de motivos, Piñero alega que “esta diputada solicita tener conocimiento de en qué situación se encuentra la impartición de la asignatura de Religión Islámica en la provincia de Granada”. Para tener ese “conocimiento”, requiere que se informe de “cuál es la formación de las personas que están impartiendo dicha asignatura, así como a qué organismo de la administración pertenecen”. Por último, pregunta sobre “qué criterios se siguen para la selección de dichos profesores”, cuestión que enlaza con “la forma en que se financia la impartición de dicha asignatura” en los centros educativos de la provincia.
Además de preguntar estos datos sobre Granada, la representante de Vox ha formulado las mismas preguntas para el resto de provincias andaluzas.La pregunta, publicada en el Boletín Oficial del Parlamento de Andalucía (BOPA) el día 2 de octubre, tiene la “calificación favorable” y ha sido admitida.
Una norma en vigor desde 1992
La Ley 26/1992 de 10 de noviembre establece en el artículo 10 de su anexo que se “garantiza a los alumnos musulmanes, a sus padres y a los órganos escolares de gobierno que lo soliciten, el ejercicio del derecho de los primeros a recibir enseñanza religiosa islámica en los centros docentes públicos y privados concertados” cuyo ideario no entre en contradicción con esta enseñanza. Diferentes normativas amparan la enseñanza también de la Evangélica y la Judía.
La normativa prevé que los centros públicos puedan impartir –atendiendo a las minorías religiosas– además de Religión Católica, la Evangélica e Islámica gracias a los acuerdos firmados entre la Administración y los representantes de estas confesiones. Su alternativa educativa es Valores sociales y cívicos en Primaria. En la ESO se denomina Valores Éticos, mientras que en Infantil esta asignatura es Atención Educativa, según el desglose estadístico del último curso del que la Consejería de Educación y Deporte ofrece datos (2017/2018).
En los concertados con ideario religioso, la norma establece que únicamente se oferte la alternativa laica a la enseñanza de la Religión Católica, sin que estén obligados a ofertar la Evangélica o Islámica.
Según estas estadísticas, en la provincia de Granada, en Primaria 47.651 alumnos cursaron Religión Católica en el 2017/2018; otros 209 –todos en la pública– recibieron clases de Evangélica; y 298 optaron por Islámica. El resto, 11.916 escolares, eligieron Valores.
En ESO, 27.918 se matricularon en Religión Católica; 385 en Evangélica; y once en “otras”. En Valores se matricularon 12.457. En el segundo ciclo de Educación Infantil, 19.186 eligieron la asignatura de Religión Católica; 92, Evangélica; 134 “otras religiones”, de los que uno estaba matriculado en un privado concertado. 4.721 se decantaron por la alternativa Atención Educativa.
En cuanto a Bachillerato, 9.224 se matricularon en Religión Católica y 30 en Evangélica. El resto, 4.199 recibió formación en Educación para la Ciudadanía.
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