Griñón,05/12/2014,EFE
Griñón reanuda desde hoy los enterramientos en el cementerio musulmán
El Ayuntamiento de Griñón reanuda a partir de hoy los enterramientos en el cementerio musulmán, tras la polémica surgida por la decisión del consistorio de cerrar esta instalación por considerar que no cumplía las exigencias de la ley mortuoria ni reunía suficientes garantías sanitarias.
La alcaldesa del municipio, María Antonia Garrido, ha confirmado a EFE que durante los últimos quince días el Ayuntamiento "ha trabajado a contrarreloj" para solucionar el conflicto, de modo que se ha realizado una obra en la parte más alta del cementerio para albergar 22 sepulturas.
De esta forma se podrán enterrar los cuerpos que han permanecido en cámaras en el tanatorio de la M-30 aguardando a la resolución del problema; en este caso se trata de cuatro fetos, que son los primeros que recibirán sepultura, a los que se sumará el cuerpo de un hombre que ha fallecido hoy.
El Ayuntamiento ha sido asesorado por las consejerías de Sanidad y Justicia de la Comunidad de Madrid, y además se ha hecho un estudio geológico en el cementerio para comprobar los niveles freáticos, llegándose a la conclusión de que se podía habilitar un espacio en la parte más alta.
Se trata de una solución de urgencia, mientras se legaliza la situación del recinto, se adapta a las normas sanitarias y se saca a concurso su explotación. Mientras tanto, ha añadido Garrido, se ha hecho un contrato menor con la empresa que actualmente gestiona el cementerio municipal.
"A partir de ahora -según la alcaldesa- los enterramientos se ajustarán al acuerdo establecido con la comunidad musulmana, de modo que se hagan compatibles sus creencias de enterrarse mirando a La Meca y con la ayuda de una persona musulmana, pero en bolsas estancas o ataúdes de cinz y con la fosa revestida".
El presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de España, Riay Tatary, aunque entiende que había que adoptar una solución de urgencia, no desiste en su intención de lograr que los musulmanes puedan enterrarse directamente en la tierra.
"Esto es factible y entendemos que en la situación actual no hay nada que impida que seamos enterrados directamente en la tierra, incluso pienso que es más sano, otra cuestión sería que se desatara una epidemia, en cuyo caso acataríamos lo que se nos ordenase", ha declarado a EFE.
Según Tatary, este hecho es una realidad en ciudades como Ceuta y Melilla y también está ampliamente aceptado en Andalucía.
Otro escollo que faltaría por salvar es el de las tasas que el Ayuntamiento de Griñón empezará a aplicar por los enterramientos.
"En España hay veinticuatro cementerios en los que se puede enterrar a los musulmanes (solo dos son exclusivos para esta población), pero en ninguno las tasas son tan altas como las que se pretenden aplicar en Griñón. Por ello, tendremos que negociar, ya que nuestra comunidad no puede asumir de golpe algo así", ha añadido Tatary.
El Ayuntamiento considera irrevocable la fijación de tarifas para el enterramiento, según ha explicado la alcaldesa de Griñón: "si cobramos a los vecinos por enterrarse en el cementerio municipal, no podemos hacer una excepción con las personas musulmanas".
Garrido espera que con la reanudación de los enterramientos vuelva la calma a Griñón, un municipio de 10.000 habitantes, en el que hay una población de 170 musulmanes censados con los que hasta ahora no había problema alguno.
"Además -concluye la alcaldesa- vamos a rehabilitar el edificio funerario y la entrada del cementerio, acondicionando este recinto de 8.000 metros que pertenece a nuestro pueblo, y todo ello en beneficio de la comunidad musulmana".
No hay comentarios:
Publicar un comentario