Porcentaje de alumnos musulmanes en España.Porcentaje de alumnos musulmanes en España. / Gráfico: J. M. Benitez
Sólo tres comunidades más, aparte de Ceuta y Melilla, han contratado docentes para ese colectivo, según la Unión de Comunidades Islámicas
Los centros de educación Primaria y Secundaria de Euskadi apenas cuentan con dos profesores de religión musulmana para 6.065 alumnos de esa confesión religiosa. El dato procede de un estudio de la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE) que especifica cómo, de todos esos escolares matriculados en el País Vasco, 1.033 son de nacionalidad española; principalmente, hijos de inmigrantes magrebíes nacidos en el territorio o en otra comunidad autónoma.
Del informe de la UCIDE se desprende una vieja queja de las asociaciones musulmanas: la ausencia en el sistema educativo de docentes que impartan religión a los estudiantes que profesan el Islam. Una carencia que no es exclusiva de Euskadi; incluso es mayor en el conjunto de España, donde los colegios e institutos acogen a 275.324 jóvenes musulmanes, y el 90% de ellos carece de su clase de religión.
La UCIDE ha extraído estas cifras de los censos de población del Instituto Nacional de Estadística (INE), a 31 de diciembre de 2014. El estudio describe los diferentes perfiles del alumnado musulmán en Euskadi y en el conjunto de España, perfiles que tienen que ver con la antigüedad de sus respectivos procesos migratorios. Así, en la comunidad vasca, donde la presencia magrebí y africana es menos numerosa y más reciente, sólo el 17% de los escolares de confesión islámica son españoles (1.033). En cambio, la media estatal es del 40% (112.214).
Contabilizando a jóvenes y adultos, Euskadi tiene una población musulmana de 47.000 personas en total, según la UCIDE. De ellas, 18.377 son marroquíes, 5.563, argelinas, 4.438 pakistaníes, 3.672 de Senegal, 2.806 de Nigeria y 7.843 tienen la nacionalidad española. Estos colectivos son muy inferiores cuantitativamente hablando a los de otras regiones, aunque ello no impide que el País Vasco sea una de las cuatro autonomías que, al menos, cuenta con algún docente para la asignatura del Islam. Las otras regiones son Andalucía (17 profesores), Aragón (3) y Canarias (1), sin contar a las ciudades de Ceuta (13) y Melilla (11).
La paradoja es que, en Madrid, Barcelona y Murcia, y en otras áreas que destacan por sus elevados contingentes de magrebíes y subsaharianos, no ejerce ni un sólo profesor de religión musulmana en los colegios públicos. Y según recuerda la UCIDE, esa situación se perpetúa desde 1996, cuando se aprobó y publicó el currículo de las clases de Enseñanza Religiosa Islámica. Y también se firmó un convenio para la contratación de esos profesores.
Control del radicalismo
Los musulmanes siempre han reclamado su propia clase de religión; entre otros motivos porque así se puede controlar la formación islámica que reciben los jóvenes. De otro modo podrían caer bajo el influjo de imanes radicales, un riesgo que se ha multiplicado con la irrupción de Internet y el auge del yihadismo.
A pesar de ello, la mayoría de profesores de religión musulmana están en paro en España. Una de las razones es que carecen de la titulación exigida para ejercer en colegios e institutos. En el País Vasco, el problema se puso de manifiesto en 2011, cuando la Unión de Comunidades Islámicas de Euskadi presentó al Departamento de Educación una lista de candidatos para impartir su religión. Se trataba de docentes que habían recibido formación en una mezquita y tenían una licenciatura técnica o de Letras.
Sin embargo, la normativa de Educación exige otros requisitos. En la etapa de 6 a 12 años hace falta el grado en Primaria (antiguamente Magisterio), mientras que en Secundaria no basta una licenciatura; es necesario también un máster. Las carencias de la enseñanza de religión islámica en Euskadi han sido cubiertas de diferentes maneras por los afectados. El Consulado de Marruecos organizó hace años clases extraescolares que ofrecían ‘Lectura del Corán’. Otras familias enviaban a sus hijos a las mezquitas durante los fines de semana.
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