Los musulmanes de la localidad de Noisiel en la región francesa de Seine-et-Marne, salieron a las calles el domingo para protestar por el cierre de la única sala de oración de la ciudad a fin junio.
Los fieles dejarán de tener un lugar donde realizar sus oraciones diarias, a pesar de las negociaciones realizadas con la municipalidad, informó el sitio, Islametinfo.
Con el objetivo de informar a la opinión pública, centenares de fieles respondieron al llamado de la Asociación Cultural Musulmana de Noisiel y salieron a las calles.
La sala, que fue el lugar de oración de los musulmanes de la localidad por más de 20 años, cerrará sus puertas antes de fin de mes y será transformada en residencias sociales en el marco de un proyecto presentado por el alcalde de la ciudad.
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