MADRID, 28 Abril de 2008, (EUROPA PRESS) -
Izquierda Unida (IU), a través de su diputado en el Grupo Parlamentario de ERC-IU-ICV, Gaspar Llamazares, ha registrado en el Congreso una proposición no de ley para "modificar el protocolo de las ceremonias de acatamiento y promesa o juramento de cargos y funciones públicas", así como para elaborar un nuevo "protocolo aconfesional para los actos y ceremonias institucionales y sus relaciones con las confesiones religiosas".
De esta manera, la coalición insta de esta manera al Gobierno a través de su texto a que se evite "todo tipo de simbología religiosa como corresponde a un Estado aconfesional", tal y como señala la Constitución Española.
Para esta formación, "la toma de posesión de cargos y funciones públicas ante el crucifijo sigue señalando la asignatura pendiente de España como Estado laico y aconfesional. La iniciativa pone como ejemplo de cómo se debe proceder lo que ya ocurre en la práctica en ambas Cámaras parlamentarias.
"No es entendible ni justificable que en un Estado aconfesional los ministros juran o prometen el acatamiento a la Constitución ante una Biblia y un crucifijo. Otros cargos o funciones públicas como los diputados y senadores acatan los preceptos constitucionales a comienzo de cada legislatura con una fórmula similar, y en el Parlamento no resultan visibles ni biblias ni crucifijos", plantea.
IU destaca que el uso y la presencia actual de los símbolos religiosos carecen de "base legal. El protocolo está regulado por el Real Decreto 707/1979, de 5 de abril, por el que se establece la fórmula de juramento de cargos y funciones públicas, que permite elegir entre prometer y jurar el acatamiento a las normas constitucionales y lealtad al Rey, aunque no se hace referencia a los símbolos religiosos".
Por todo ello, los dos puntos de la proposición instan directamente al Gobierno a "modificar el protocolo de las ceremonias de acatamiento y promesa o juramento de cargos y funciones públicas, incluido si fuese necesario el Real Decreto 707/1979, de 5 de abril, por el que se establece la fórmula de juramento en cargos y funciones públicas, para evitar todo tipo de simbología religiosa como corresponde a un Estado aconfesional".
Según la organización este vacío legal lleva a preguntarse "si un futuro ministro musulmán tendría también derecho a exigir el Corán", algo que no está en absoluto regulado. Por eso, propone "elaborar un Protocolo aconfesional para los actos y ceremonias institucionales y sus relaciones con las confesiones religiosas".