Ginebra, 07.05.2017,EFE).
La Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), un organismo vinculado al Episcopado de la Iglesia católica, divulgó recientemente un informe según el cual la violencia en el campo en Brasil alcanzó en 2016
La ministra de Derechos Humanos de Brasil, Luislinda Dias de Valois Santos, expresó hoy el "rechazo y la indignación" del Gobierno del presidente Michel Temer ante actos de violencia contra indígenas en el país.
"Quisiera reiterar el rechazo y la indignación del Gobierno del presidente Temer ante actos de violencia contra estos segmentos vulnerables de la población brasileña", sostuvo durante su discurso ante el Consejo de Derechos Humanos durante la revisión periódica universal de la situación de derechos humanos del país.
Esta condena de Dias de Valois Santos se produce después de que recientemente al menos trece indios resultaran heridos, tres de ellos en estado grave y con manos amputadas, al ser atacados por hombres armados durante el conflicto por tierras en Brasil.
La Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), un organismo vinculado al Episcopado de la Iglesia católica, divulgó recientemente un informe según el cual la violencia en el campo en Brasil alcanzó en 2016 su peor nivel en los últimos 13 años, con 61 muertes en 1.536 conflictos por la tierra.
De las 61 víctimas el año pasado, 13 eran indios, 4 descendientes de esclavos prófugos, 6 mujeres y 16 jóvenes de menos de 29 años.
Dias de Valois Santos explicó ante la ONU que en 2016 se lanzó un programa integral para la implementación de la Política Nacional de Gestión Ambiental y Territorial de las Tierras Indígenas, cuyo objetivo es asegurar que los indígenas puedan ocupar y gestionar plenamente sus tierras.
Recordó que en Brasil hay 462 zonas indígenas demarcadas y que el Gobierno está en el proceso de demarcar más tierras.
La mayoría de las zonas indígenas se encuentra en la región amazónica.
Según el informe del Gobierno brasileño presentado para la revisión periódica universal ante el Consejo de Derechos Humanos, se tienen registradas 77 referencias de poblaciones indígenas aisladas voluntariamente, en su mayor parte en el norte del Brasil.
En el Brasil habitan 817.963 personas indígenas de 305 grupos étnicos distintos que hablan 274 idiomas.
La ministra de Derechos Humanos apuntó además al compromiso del Gobierno brasileño a consultar "de buena fe" con representantes de los indígenas para abordar los proyectos que les pueden afectar.
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