lunes, 1 de mayo de 2017

A pesar de las reclamaciones de Trump, ya existe un incentivo para contratar trabajadores estadounidenses cualificados

USA, 30 de abril de 2017, citypages.com, por Susan Du en Noticias


Universidad de Minnesota Profesor Abdennour Abbas (centro) prueba una esponja que desarrolló que puede chupar el mercurio de agua contaminada.Ke Xu

Como parte de su plataforma "America First", el presidente Donald Trump recientemente ordenó la revisión y reforma de la visa H-1B, un programa de trabajadores invitados que invita a los mejores y más brillantes mentes extranjeras a llenar puestos de trabajo en ciencia y tecnología estadounidenses.

La orden ejecutiva, "Buy American and Hire American", se basa en la noción de que las empresas están cada vez más evitando a los estadounidenses calificados en favor de la mano de obra extranjera barata.

Hay un montón de estudios que dicen que esto no es cierto, y algunos que dicen que es. Dependiendo de lo que usted pida, el programa de visas H-1B es una herramienta esencial para que la competitividad de los Estados Unidos retenga la mejor cosecha de inmigrantes de todo el mundo, o una escapatoria para que las empresas reduzcan los costes laborales.

En Minnesota, donde las necesidades de mano de obra están superando el crecimiento de la población en una variedad de sectores, las empresas de TI, las instituciones de investigación y las universidades han sido los mayores empleadores de trabajadores extranjeros altamente calificados.

Pero incluso entonces, el número de puestos de trabajo que ocupan es relativamente pequeño. En todo el estado, hay sólo unos 2.000 titulares H-1B.

A nivel nacional, las visas H-1B tienen un límite de 85.000, lo que significa que hay una intensa lotería anual para esos trabajos. De los puestos disponibles, 20.000 están reservados para personas que han obtenido un título de maestría o superior profesional americano.

Este año, alrededor de 200.000 aspirantes se aplicaron. Cada uno tenía que ser lo suficientemente excepcional como para ganar el patrocinio de un negocio dispuesto a asumir los honorarios de presentación inmensa (hasta $ 10.000), los honorarios de abogados (depende) y seis meses de espera para que el gobierno responda. Antes de que empiece todo esto, la empresa tuvo que aceptar una lista jurídicamente vinculante de condiciones, incluida la de pagar

1782/5000

El salario predominante del trabajador, y asegurando que el trabajador no perjudicaría las condiciones de trabajo de otros.

Es una gran molestia y el gasto que las empresas tienen todos los incentivos para contratar a los estadounidenses en su lugar, dice el abogado de inmigración de Minneapolis Sarah Peterson.

"Puedo garantizarles si mis empleadores [clientes] pueden encontrar a trabajadores estadounidenses para llenar sus papeles de alta habilidad, los contratan porque [H-1B es] un enorme gasto de negocios, es una molestia, y es impredecible", dice Peterson .

"Las empresas necesitan esa previsibilidad para poder contratar de inmediato, para saber cuál será su fuerza de trabajo, con el sistema de lotería tal y como está establecido, depende de si tiene o no esa suerte de Vegas a su lado".

Sin embargo, los opositores al programa argumentan que el abuso es frecuente. En 2016, el Congreso escuchó una serie de ejemplos. El ingeniero de TI de Disney, Leo Perrero, describió cómo él y dos docenas de sus colegas fueron de pronto despedidos y forzados a entrenar a sus reemplazos extranjeros. El abogado de trabajo John Miano planteó el caso de Southern California Edison, que reemplazó a cientos de trabajadores estadounidenses de TI con mano de obra india.

Estos y otros informes alimentaron una reacción pública contra el "mito" de que los trabajadores de H1-B cumplen roles que los estadounidenses no pueden.

Mark Schneider, que trabaja en el departamento internacional de la Universidad de Minnesota, dice que se ha gastado una gran cantidad de atención en el pequeño número de empleadores que usan mal el programa.

El Congreso ha decidido previamente que los grandes empleadores de Minnesota n H-1B, como la universidad y la Clínica Mayo, están exentos de tapas en las contrataciones de H-1B, señala, porque "cuando crearon las regulaciones, sabían que hacer investigación en instituciones de investigación y universidades era necesario Para nuestro desarrollo educativo como país ".

La universidad tiene actualmente cerca de 370 extranjeros que trabajan en la investigación de alto nivel y la enseñanza de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y la medicina.

Ellos incluyen al Prof. Abdennour Abbas, cuyo laboratorio creó una esponja que puede eliminar el mercurio del agua contaminada en cuestión de segundos; El profesor adjunto Sairaj Dhople, quien desarrolla tecnologías para integrar la energía renovable en la red eléctrica; Asistente del Prof. Mikael Elias, quien ha desarrollado enzimas que matan a las antibacterias resistentes a los antibióticos; Y el investigador Dr. Ezequiel Marron, quien está estudiando la base neurológica de la adicción a las drogas.

Estos no son puestos de trabajo que se pierden a los estadounidenses, en lo que respecta a Schneider. Es su trabajo asegurarse de que los "altamente valorados" empleados extranjeros de la universidad reciban el mismo salario que sus homólogos estadounidenses, o que la escuela sea sancionada por la Inmigración.

"Es un proceso enorme tomar dinero, tiempo, esperando para contratar. ¿Por qué pondremos todo esto si no lo necesitamos? ", Dice.

"Hay algunas compañías que juegan rápido y suelto con las reglas y tienen la mayoría de los extranjeros, pero aquí, les estamos pagando lo que pagamos a los post-docs, investigadores, profesores. Deberían reprimir a los empleadores que hacen un mal nombre para todo el programa H-1B ".

En noticias relacionadas, la propuesta de presupuesto del presidente "América Primero" también pide grandes recortes a la ciencia y la educación. Los Institutos Nacionales de la Salud se enfrentan a una eclosión de 18 por ciento, y el Departamento de Educación perdería 13,5 por ciento, lo que incluye la eliminación de más de $ 2 mil millones para un programa que ayuda a los estados a reclutar maestros de ciencias y matemáticas.

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