Hallazgo de una torre medieval

El índice de la arqueóloga indica una ilustración del siglo XVII en la que aparece la torre

Unas catas en el Bastió des Governador de Ciutadella descubren una estructura que, si se confirma que es de época musulmana, sería única junto a Santa Àgueda o el antiguo minarete de la Catedral

Ciutadella,15-10-2008,menorca.info

Bastió. Los restos se ubican en la parte trasera del AyuntamientoCatas. La arqueóloga María José León, ayer, en la zona de intervención

Unas catas arqueológicas han puesto al descubierto los restos de una torre de época medieval que ha permanecido durante siglos escondida en el recinto del Bastió des Governador de Ciutadella. Es una estructura vertical, de planta baja más dos pisos, de unos 40 metros cuadrados, que si se confirman las hipótesis de que fue construida en época musulmana sería un legado único de la importancia de Santa Àgueda o del vestigio del antiguo minarete en la Catedral.

El hallazgo se produce a raíz de un sondeo encargado por el Ayuntamiento en la parte trasera de las Casas Consistoriales para comprobar el estado de las dependencias posteriores a las oficinas de CITUR. El concejal de Turismo, Gabriel Cardona, se refiere al proyecto del Plan de Dinamización del Producto Turístico para adecuar varias estancias infrautilizadas como centro de interpretación y punto de partida para las visitas guiadas al centro histórico.

“La sorpresa ha sido el hallazgo. Por primera vez, unos trabajos arqueológicos son previos a un proyecto que, de momento, tendrá que esperar hasta los resultados de las excavaciones”, dice. El equipo de gobierno quiere investigar este espacio olvidado dentro del Bastió des Governador. “En cualquier caso, será siempre un valor añadido si queremos ejecutar el centro de interpretación”, dice.

El alcalde de Ciutadella, Llorenç Brondo , y la concejala de Cultura, Adrienne Sans, califican el hallazgo de “muy importante” para la historia de la ciudad. Los restos aparecieron hace diez días y se comunicaron al Departamento insular de Patrimonio, que, según el alcalde, ha dado autorización para la excavación. Todo apunta a que los trabajos se prolongaran durante los próximos meses para determinar la época y función de esta estructura vertical, que en su día, debía tener privilegiadas vistas al puerto y a la bahía de Ciutadella. Los arqueólogos apuntan a su posible función de fortaleza o torre vigía, aunque insisten en que se trata de hipótesis preliminares.

Un yacimiento capital

El gerente de Cultura, Josep Marquès, afirma que “no es ninguna sorpresa teniendo en cuenta que nos encontramos en el lugar de mayor potencia estatigráfica de Ciutadella”. Incluso se refiere a que en unas catas dirigidas por Cristina Rita en los años 80 en la zona que ocupaba la Policía, aparecieron restos de época romana. “Si se confirman las hipótesis, los turistas podrán visitar uno de los yacimientos capitales de la Ciutadella musulmana”, dice, mientras añade que la torre ha sobrevivido al paso del tiempo y a las continuas superposiciones modernas en el edificio municipal.

Maribel Herranz, que junto a María José León codirigirá los trabajos, informa que los documentos históricos y la cartografía y dibujos del siglo XVII confirman la existencia de esta torre. “Por tanto, todo indica que como mínimo es anterior al siglo XVI”.

El cronista archivero municipal, Florenci Sastre, explica que en un dibujo francés del siglo XVIII se puede observar la muralla que ordenó construir en 1303 el rey Jaume II. En la ilustración se aprecia, según el historiador, cómo las torres construidas eran redondas, a imitación de las de Montpellier, excepto la torre en cuestión, de forma cuadrada como en el recinto de Santa Àgueda.

“Según la fuentes históricas, posteriormente se construyó el Bastió des Governador, el fortín respetó la antigua torre que se forró de piedra”. Sobre si antes de 1303 existía algún tipo de muralla en Ciutadella, Florenci Sastre explica que “en la época musulmana había una de menores dimensiones y de recorrido incierto. En la crónica del rey Jaume I se citan verbos como ‘entrar’ y ‘eixir de la vila’, que da idea de una ciudad cerrada”. Tras la conquista, Jaume II amplió el recorrido y la altura para incluir Sant Francesc y Santa Clara dentro del perímetro.

Sastre alude a que en el periodo musulmán hay constancia de que en las Casas Consistoriales -que a lo largo de la historia han sido residencia del gobernador de la Isla- no residía el almojarife. El palacio y sus jardines se encontraban en la zona que ocupa actualmente Can Salort. “El actual edificio municipal debía ser una fortificación, la más elevada de la población en aquella época”, indica.

Los arqueólogos destacan que los vestigios del periodo musulmán en la ciudad han aparecido en el subsuelo, por lo que la torre descubierta sería un legado vertical único.

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