Según las fuentes fidedignas, los actos de violencia contra los musulmanes rohingya aún no están terminados.El Papa menciona finalmente a los rohingya.El hecho ha tenido lugar durante un discurso en Bangladesh cuando ha recibido a 16 refugiados rohingya
En estos días en los que se hacen declaraciones contradictorias sobre la repatriación de los musulmanes de Arakán, se reveló que sus casas siguen siendo quemados.
Según las fuentes fidedignas, los actos de violencia contra los musulmanes rohingya aún no están terminados. Las fuentes comunicaron que no han cesado de prender fuego las casas en algunos pueblos en Maungdaw, el lugar mayoritariamente poblado por los musulmanes donde se desataron los sucesos violentos en la región.
La administración bangladesí convoca frecuentemente a los musulmanes de Arakán a la repatriación. En tal sentido, los gobiernos de Birmania (Myanmar) y Bangladesh firmaron un acuerdo el pasado 23 de noviembre.
Según el acuerdo, aunque los musulmanes rohingya, para repatriar a Birmania, deben presentar documento que muestra que vivían en Birmania antes de desplazarse a Bangladesh, la ausencia de sus registros en Birmania, cuyo derecho a la ciudadanía se le levantó en 1982, crea grandes problemas.
El convenio prevé que los documentos concedidos por Bangladesh a los musulmanes de Arakán deben pasar por el proceso de "autorización" del Gobierno birmano.De acuerdo con los recientes datos anunciados por la ONU, desde el 25 de agosto, 655 mil musulmanes de Arakán se han refugiado en Bangladesh escapando de la violencia en Birmania.
Mientras se pronostica que unos 2 millones de musulmanes vivían en Arakán en los años 1970, esta cifra bajó hasta 350 mil por los escapes sistemáticos. Las imágenes satélites emitidas por las instituciones internacionales de derechos humanos muestran que se quemaron más de 350 pueblos que pertenecen a los musulmanes en la región.
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