La comunidad musulmana pide más control al Gobierno tras la muerte de un trabajador de un invernadero

Almería, 29 enero 2019,ideal.es, Alicia Amate

Compañeros del fallecido durante la protesta del pasado día 21 ante la Subdelegación de Gobierno. / A. A.

Demandan que se vigile que las empresas doten a los empleados de material de protección para sulfatar para evitar que ocurran nuevos envenenamientos

Llegó a casa sintiéndose mal y, poco después, falleció en el hospital de El Toyo. Según denuncian los sindicatos y su propia familia, se trató de un caso de envenenamiento. Un centenar de trabajadores, la mayoría magrebíes y 0, protestaron la semana pasada ante las sedes de la Subdelegación del Gobierno y de la Delegación de Gobierno de la Junta de Andalucía por la muerte de Mohammed El Bouhaled, esta varón de origen marroquí y 25 años de edad que viene a ser el primer muerte por motivos laborales en la provincia de este año. De hecho, esta mañana a las 12 horas, los principales sindicatos han organizado una concentración frente al edificio sindical de la capital, como ocurre cada vez que se da un nuevo caso de este tipo.

Por su parte, representantes de la asociación Almohamadia, dedicada al trabajo social y los derechos humanos en Almería, mantuvieron durante la jornada de ayer un encuentro con el subdelegado de Gobierno, Manuel de la Fuente, con objeto de trasmitir sus peticiones «para que no se repita esta situación con otro trabajador».

Sugieren desde este colectivo que el subdelegado de Gobierno «se interese en los problemas del campo, en especial en aquellos invernaderos que deben sulfatar las hortalizas, ya que este producto es nocivo para la salud, no hay un control minucioso al respecto», algo de lo que acusan a los empresarios del sector, «que hacen mal uso de los materiales que utilizan». De hecho, también reclamaron que la Inspección de Trabajo «controle en los invernaderos a los empresarios» para evitar problemas «irreparables».

Destacan desde la asociación que «los trabajadores no se pueden negar a realizar la labor encomendada por lo que «los encargados de las empresas del campo deben ser personas responsables, quienes deben velar por el buen funcionamiento de la empresa», concluyen.

El cuerpo del fallecido fue trasladado tras realizarle la autopsia a Marruecos, donde se ha llevado a cabo su funeral y entierro.