Del total de las muertes, la mitad ocurrió en el mediterráneo, mientras que otras 135.000 persona lograron migrar a Europa, según cifras de la Organización Internacional para las Migraciones
Un total de 4.476 personas perdieron la vida en las peligrosas rutas migratorias alrededor del mundo en 2018, según reportó la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
En un reporte publicado el Día Internacional del Migrante, que se celebra el 18 de diciembre de cada año, la agencia de la ONU informó que cientos de miles de personas siguen migrando dese sus tierras natales para huir de conflictos, malas condiciones económicas o presiones políticas.
De acuerdo con los datos de la OIM, 2.217 muertes, es decir, casi la mitad del total de fallecimientos en lo corrido de este año, han tenido lugar en el Mediterráneo.
Este año, al menos 135.000 personas han migrado a Europa por varias razones, como la guerra, la búsqueda por una mejor calidad de vida, desastres naturales y presión política, señaló el informe.
Los migrantes que llegaron a Europa provienen, en su mayoría, de Siria, Túnez, Eritrea, Pakistán, Irak, Congo, Afganistán, Marruecos y Mali.
De igual forma, cientos de miles de personas han intentado migrar a Estados Unidos y Canadá desde países de Suramérica y Centroamérica por hambruna, violencia y presión política.
De acuerdo con las cifras arrojadas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, se evitó que cerca de 400.000 personas ingresaran al país de manera ilegal este año.
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