miércoles, 20 de diciembre de 2017

El Papa y el Rey de Jordania comparten el rechazo a la capitalidad de Jerusalén

EL VATICANO,19/12/2017,abc.es,JUAN VICENTE BOO


El Monarca Abdalá II, cuyo país es Custodio de los Santos Lugares, considera que la decisión de Trump «viola la ley internacional y las resoluciones de Naciones Unidas».

Al término del encuentro entre el Papa Francisco y el Rey Abdalá II de Jordania, dedicado a «la cuestión de Jerusalén», el Vaticano reiteró «el papel de Custodio de los Santos Lugares del soberano hachemí» y la decisión común de «favorecer las negociaciones entre las partes interesadas», es decir, Israel y Palestina.

El Papa se manifestó ya contra el traslado de la embajada norteamericana de Tel Aviv a Jerusalén el pasado 6 de diciembre, y desde entonces mantiene frecuentes contactos con líderes de la región para defender el «statu quo» de la Ciudad Santa y la negociación directa entre palestinos e israelíes para llegar a la solución de «dos Estados» dentro de «las fronteras internacionalmente reconocidas».

En la audiencia de veinte minutos al Rey de Jordania participó también el príncipe Ghazi Bin Muhhammad Bin Talal, responsable de asuntos interreligiosos y principal colaborador de Abdalá II en la protección del clima de igualdad y respeto a los cristianos en Jordania.

El comunicado de la casa real jordana coincide con el del Vaticano en los términos esenciales, pero añade explícitamente que la decisión de Donald Trump de trasladar la embajada «viola la ley internacional y las resoluciones de Naciones Unidas».

El 6 de diciembre, el Papa subrayó «no poder callar mi profunda preocupación» por el anuncio del traslado de la embajada y dirigió «un ferviente llamamiento para que todos se comprometan a respetar el "statu quo" de la ciudad de Jerusalén», una «ciudad única, sagrada para los judíos, cristianos y musulmanes, que tiene una vocación especial de paz».

En tono grave, pidió también «que prevalezca la sabiduría y la prudencia, para evitar añadir nuevos elementos de tensión a un panorama mundial convulso y marcado por tantos conflictos crueles».

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