Tensión en Nou Barris, Barcelona, por dos grupos de manifestantes que protestan, a favor y en contra, de la construcción de una mezquita en el barrio. Las dos marchas están separadas por menos de 15 metros y van acompañadas de efectivos de los Mossos d'Esquadra.
El edificio se quiere construir en la calle Japó y eso ha causado división entre los vecinos. Por su parte, los detractores argumentan que es una calle demasiado estrecha para un centro de este tipo.
En cambio, hay muchos habitantes que se muestran a favor porque consideran que no molesta y que los musulmanes de la comunidad hace mucho tiempo que viven en el barrio y están perfectamente integrados. Como consecuencia, una cincuentena de antifascistas han decidido salir este sábado por la tarde en la calle para condenar a los detractores.
Por ahora, la comunidad musulmana ha decidido dejar bajadas las persianas, que han sufrido varios destrozos y pintadas contrarias a la apertura del centro, aunque las obras están acabadas, pero el centro todavía no tiene el permiso para abrir.
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