Pese a que la tasa de escolarización entre los niños sirios que viven en los campamentos de refugiados en Turquía es del 85%, ésta cae hasta el 30% entre aquellos que residen fuera de los campos.
Unos 700.000 niños sirios refugiados de edades comprendidas entre los 6 y los 17 años que viven actualmente en Turquía necesitan recibir educación, pero la mayoría de los que residen fuera de los campos de refugiados construidos por las autoridades turcas en el sur y sureste del país no asisten a clases, según refleja el Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo de la UNESCO elaborado conjuntamente con datos del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Bajo el título “No más excusas: proveer educación para todas las personas desplazadas a la fuerza”, el informe presenta un panorama completo de la situación educativa entre los refugiados de todo el planeta, demandando de los países de acogida que incluyan en sus programas educativos a los desplazados que cobijan y que realicen un seguimiento sobre su situación.
En el caso concreto de Turquía, el documento muestra que mientras que entre los niños refugiados sirios que viven en campos de desplazados construidos en el país la tasa de escolarización es del 85%, entre aquellos que residen fuera de los campos –en viviendas propias o compartidas por las ciudades de todo el país- este porcentaje cae hasta sólo el 30%: una situación preocupante, dado que apenas 300.000 de los cerca de 3 millones de refugiados sirios que viven en Turquía se encuentran alojados en campos.
Según cifras recientes publicadas por el Ministerio de Educación de Turquía, las tasas de escolarización entre los refugiados sirios en el país son del 7% en educación preescolar, del 52% en primaria, del 30% en secundaria y del 10% en estudios superiores; en 2015 estos porcentajes eran respectivamente del 6,6%, 52,3%, 31,3% y 9,8%, según documenta el propio ministerio.
Estos datos se conocen mientras tiene en lugar en Estambul la I Cumbre Humanitaria Mundial con la asistencia de líderes políticos y representantes de 125 países –incluyendo el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon- precisamente con la peor crisis de refugiados que afronta Europa desde la II Guerra Mundial como principal tema de la agenda política de la cumbre.
900.000 niños sirios escolarizados para 2017
Durante una conferencia celebrada a finales de marzo en Washington, el presidente de la Agencia de Gestión de Desastres y Emergencias de Turquía (AFAD), Fuat Oktay, ya reconoció que pese a los esfuerzos del gobierno “sólo el 30% de los niños (refugiados sirios en Turquía) tienen acceso a la educación”.
“Para finales de 2016 proporcionaremos acceso a la educación a unos 450.000 niños, y para 2017 a todos los 900.000 niños sirios en Turquía”, aseguró Oktay, quien no obstante pidió más ayuda de la comunidad internacional para ayudar a Turquía, que se ha convertido en el país con más refugiados del mundo.
“Cada niño sirio al que no conseguimos llegar y escolarizar, es un riesgo para Turquía y para el mundo”, añadió el responsable de AFAD, señalando que unos 330.000 niños refugiados sirios habían sido sacados hasta la fecha de las calles para ser escolarizados en colegios públicos. Oktay también recordó que todos los sirios que residen en Turquía gozan de acceso gratuito a los servicios médicos, indicando en este sentido que cerca de 13 millones de sirios han sido tratados hasta la fecha en centros de salud del Estado.
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