Un grupo de colonos israelíes ha incendiado este miércoles una mezquita ubicada en la localidad cisjordana de Salfit, tal y como ha denunciado Ghassan Douglas, quien está al frente del seguimiento de la actividad en los asentamientos en el norte de Cisjordania. En base a estas informaciones, los colonos habrían prendido fuego a la entrada de la mezquita Alí bin Abu Talib, tras lo que han realizado varias pintadas en las paredes del edificio, según ha recogido la agencia palestina de noticias Maan.
El incidente ha tenido lugar apenas horas después de que varios colonos apedrearan un vehículo perteneciente al Ministerio de Sanidad de la Autoridad Palestina en los alrededores de la localidad cisjordana de Al Sawiya, ubicada cerca de Nablús. El alto cargo del ministerio Wahid Shamasneh ha indicado que las lunas del coche han sido reventadas a pedradas y que varios de los trabajadores que viajaban en el vehículo han resultado heridos de levedad por cortes de cristal.
El ministro de Sanidad, Jawwad Awwad, ha tildado el ataque de "bárbaro y atroz" y ha destacado que muestra "los actos de la ocupación y sus acciones inhumanas, que son rechazadas por todos los acuerdos y principios internacionales". También durante la jornada del martes, el Ejército israelí ha interceptado en dos ocasiones el convoy del primer ministro palestino, Rami Hamdalá, cuando circulaba por Cisjordania para pedir los papeles a los integrantes de la comitiva, lo que ha sido rechazado por el mandatario.
En un primer incidente, el convoy fue detenido en las afueras de la localidad de Ramala, tal y como ha revelado el portavoz del Gobierno palestino, Ehab Bseiso, quien ha detallado que Hamdalá se negó a cooperar con las fuerzas israelíes.
Asimismo, ha descrito la situación como una "agresión" y un "insulto" por parte de Israel contra el pueblo palestino, según ha informado la agencia oficial palestina de noticias, WAFA. Bseiso ha agregado además que se ha tratado de un incidente "premeditado", ya que en esa zona no hay ningún puesto de control habitualmente. Apenas horas después, las fuerzas israelíes interceptaron una vez más el convoy de Hamdalá cuando circulaba cerca de la localidad de Nablús. En esta ocasión, Bseiso ha puntualizado que el incidente tuvo lugar cerca del puesto de control de Zaatara y ha asegurado que, una vez más, los integrantes del convoy se negaron a identificarse.
Por su parte, fuentes de seguridad israelíes han indicado que el convoy fue interceptado por "conducción temeraria" y ha indicado que, pese a que intentaron permitir que Hamdalá continuara su camino, éste insistió en hacerlo junto al resto de la comitiva, tal y como ha recogido el diario israelí 'Yedioth Ahronoth'. Por último, estas fuentes han dicho que uno de los agentes se disculpó ante el primer ministro palestino por interceptar su vehículo y que Hamdalá respondió llamando "perro" a uno de los policías.
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