Poitiers,20/10/2012,terra.com.pe
Unos 70 militantes de extrema derecha ocuparon este sábado durante varias horas una mezquita en construcción de Poitiers, en el centro de Francia, en una manifestación calificada por el gobierno de "provocación odiosa" y que indignó a la comunidad musulmana.
Hacia las 05H45 (03H45 GMT), unas 70 personas ocuparon el gran edificio gris con minarete, situado a las afueras de Poitiers, en la localidad de Buxerolles. Los manifestantes se instalaron en el techo de la futura gran mezquita de Poitiers y desplegaron una pancarta con el nombre de su grupúsculo "Génération identitaire" ("Generación identitaria").
Hacia el mediodía, aceptaron marcharse del lugar y la evacuación terminó poco antes de las 13H00 locales. Tres militantes, que se presentaron como los organizadores, fueron detenidos. El primer ministro francés Jean-Marc Ayrault condenó "firmemente esta provocación que muestra un odio religioso inaceptable". El ministro del Interior Manuel Valls también denunció una "provocación odiosa e inadmisible".
La fiscalía abrió una investigación por "manifestación no autorizada, provocación al odio racial y participación en agrupación para la degradación de propiedades en reunión". "Queríamos quedarnos más tiempo, pero como no teníamos la intención de enfrentarnos físicamente, nos fuimos con la policía, de buena gana, sin que esto terminara mal", declaró Damien Rieu, portavoz del grupúsculo contactado por teléfono.
"Poitiers está en estado de shock", declaró el alcalde de esta ciudad de 90.000 habitantes, Alain Claeys, que indicó que los militantes de extrema derecha "venían de toda Francia" y parecían muy organizados, equipados con ordenadores y pancartas. Por la tarde, el alcalde y el prefecto se reunirán con los representantes de la comunidad musulmana.
El Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM) expresó "su fuerte indignación" y "su profunda inquietud frente a esta nueva forma de violencia antimusulmana que muestra una vez más la voluntad de estos grupúsculos de poner en peligro nuestra convivencia y nuestra cohesión nacional con la incitación al odio y a la división". Francia alberga la comunidad musulmana más importante de Europa con entre 4 y 6 millones de miembros.
Unos 70 militantes de extrema derecha ocuparon este sábado durante varias horas una mezquita en construcción de Poitiers, en el centro de Francia, en una manifestación calificada por el gobierno de "provocación odiosa" y que indignó a la comunidad musulmana.
Hacia las 05H45 (03H45 GMT), unas 70 personas ocuparon el gran edificio gris con minarete, situado a las afueras de Poitiers, en la localidad de Buxerolles. Los manifestantes se instalaron en el techo de la futura gran mezquita de Poitiers y desplegaron una pancarta con el nombre de su grupúsculo "Génération identitaire" ("Generación identitaria").
Hacia el mediodía, aceptaron marcharse del lugar y la evacuación terminó poco antes de las 13H00 locales. Tres militantes, que se presentaron como los organizadores, fueron detenidos. El primer ministro francés Jean-Marc Ayrault condenó "firmemente esta provocación que muestra un odio religioso inaceptable". El ministro del Interior Manuel Valls también denunció una "provocación odiosa e inadmisible".
La fiscalía abrió una investigación por "manifestación no autorizada, provocación al odio racial y participación en agrupación para la degradación de propiedades en reunión". "Queríamos quedarnos más tiempo, pero como no teníamos la intención de enfrentarnos físicamente, nos fuimos con la policía, de buena gana, sin que esto terminara mal", declaró Damien Rieu, portavoz del grupúsculo contactado por teléfono.
"Poitiers está en estado de shock", declaró el alcalde de esta ciudad de 90.000 habitantes, Alain Claeys, que indicó que los militantes de extrema derecha "venían de toda Francia" y parecían muy organizados, equipados con ordenadores y pancartas. Por la tarde, el alcalde y el prefecto se reunirán con los representantes de la comunidad musulmana.
El Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM) expresó "su fuerte indignación" y "su profunda inquietud frente a esta nueva forma de violencia antimusulmana que muestra una vez más la voluntad de estos grupúsculos de poner en peligro nuestra convivencia y nuestra cohesión nacional con la incitación al odio y a la división". Francia alberga la comunidad musulmana más importante de Europa con entre 4 y 6 millones de miembros.
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