Musulmanes rezando en una mezquita de Castellón. :: LPUna de cada cuatro sociedades inscritas en el registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia son de origen musulmán
LA CIFRA
28 mezquitas hay inscritas en la actualidad en el registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia, por las únicamente diez que existían en 2006. Sin embargo, podrían ser más, ya que hay entidades no registradas en las que también se profesa el culto musulmán.
La presencia de la comunidad musulmana en la provincia vive una dinámica claramente ascendente durante los últimos años. Buena prueba de ello es la existencia de cada vez más mezquitas en territorio castellonense, que crecen a un ritmo exponencial. Así lo refrendan los datos del Ministerio de Justicia en su registro de entidades religiosas, que refleja que en la actualidad hay 28 en funcionamiento en Castellón.
Esta cifra supone que estos centros de culto se han multiplicado casi por tres en el plazo de únicamente cinco años, puesto que en 2006 el número de asociaciones islámicas en la provincia, ya fueran de carácter cultural o religioso, se elevaba solamente a diez.
La capital de la Plana, como es lógico, es la localidad que más mezquitas acoge, con cinco. Sin embargo, su presencia se extiende por toda la provincia, incluso en municipios tan pequeños a nivel demográfico como Altura o les Coves de Vinromà. El resto de centros de culto del territorio castellonense se encuentran situados en Alcalà de Xivert, l´Alcora, Almassora, Benicàssim, Benicarló, Burriana, Onda, Nules, Oropesa, Peñíscola, la Vall d´Uixó, Vall d´Alba, San Mateu, Moncofa, Vila-real y Vinaròs.
El peso de las entidades religiosas de carácter islámico en Castellón se puede apreciar claramente con un dato: en la actualidad, hay 28 instituciones de este tipo, por las 114 que hay inscritas en el Ministerio de Justicia como asociaciones católicas. Es decir, que a pesar de la tradición cristiana de la provincia, en 2011 una de cada cuatro entidades religiosas son de origen musulmán.
Además, esta estadística puede resultar engañosa, ya que la diferenciación legal entre una entidad en la que se practique el culto y otra que acoja cualquier otro tipo de actividades se encuentra en la actualidad muy difuminada entre este colectivo, por lo que el número de mézquitas 'de facto' puede ser todavía más elevado, tal y como reconocen desde el Foro Alternativo de la Inmigración.
De momento, la comunidad musulmana sigue dando pasos para afianzar su integración en la provincia. Así, el pasado mes de marzo las tres federaciones islámicas de la Comunitat Valenciana acordaron por unanimidad la creación de una comisión gestora para la constitución de una Comisión Islámica de la Comunitat, en la que estarán incluidas hasta 22 entidades de Castellón. Esta asociación se convertirá en el único representante oficial de la comunidad musulmana en territorio autonómico.
La comisión tendrá, entre otros objetivos, el de fomentar la integración social de la población musulmana, reforzar el tejido asociativo, dar apoyo a la vida organizativa de los diferentes grupos de entidades islámicas o promover programas preventivos para evitar conductas islamofóbicas.
Problemas
Por otra parte, no han sido pocos los problemas que se han originado a consecuencia de la instalación de mezquitas en varias localidades de Castellón en los últimos años.
El precedente más cercano se dio el año pasado, cuando los vecinos de Benicarló de la calle Isaac Albéniz, situada junto al centro de oración del municipio, iniciaron una recogida de firmas para presentar en el Ayuntamiento un escrito en el que denunciaban los problemas de convivencia que supone la actividad de este recinto entre el vecindario. Los firmantes alegaban que la mezquita causaba problemas de ruido, malos olores y que se cocinaba en su interior.
Antes, en el año 2008, se produjo una operación contra el terrorismo islámico en la provincia, que finalizó con un detenido en Burriana y cuatro en Vila-real. Uno de estos últimos era Mohamed Bouacha, imán de la mezquita de la localidad, lo que provocó que se disparara la alarma entre los vila-realenses.
El recinto, previamente, ya había sido el foco de las quejas de los vecinos, que, al igual que los de Benicarló, relataban conductas incívicas por parte de los asistentes. Asimismo, antes de que se produjera la detención de Bouacha, un decreto del Ayuntamiento ya había ordenado el cierre de la mezquita, puesto que los técnicos municipales alegaban que no cumplía los requisitos necesarios para servir de local de culto.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
LA CIFRA
28 mezquitas hay inscritas en la actualidad en el registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia, por las únicamente diez que existían en 2006. Sin embargo, podrían ser más, ya que hay entidades no registradas en las que también se profesa el culto musulmán.
La presencia de la comunidad musulmana en la provincia vive una dinámica claramente ascendente durante los últimos años. Buena prueba de ello es la existencia de cada vez más mezquitas en territorio castellonense, que crecen a un ritmo exponencial. Así lo refrendan los datos del Ministerio de Justicia en su registro de entidades religiosas, que refleja que en la actualidad hay 28 en funcionamiento en Castellón.
Esta cifra supone que estos centros de culto se han multiplicado casi por tres en el plazo de únicamente cinco años, puesto que en 2006 el número de asociaciones islámicas en la provincia, ya fueran de carácter cultural o religioso, se elevaba solamente a diez.
La capital de la Plana, como es lógico, es la localidad que más mezquitas acoge, con cinco. Sin embargo, su presencia se extiende por toda la provincia, incluso en municipios tan pequeños a nivel demográfico como Altura o les Coves de Vinromà. El resto de centros de culto del territorio castellonense se encuentran situados en Alcalà de Xivert, l´Alcora, Almassora, Benicàssim, Benicarló, Burriana, Onda, Nules, Oropesa, Peñíscola, la Vall d´Uixó, Vall d´Alba, San Mateu, Moncofa, Vila-real y Vinaròs.
El peso de las entidades religiosas de carácter islámico en Castellón se puede apreciar claramente con un dato: en la actualidad, hay 28 instituciones de este tipo, por las 114 que hay inscritas en el Ministerio de Justicia como asociaciones católicas. Es decir, que a pesar de la tradición cristiana de la provincia, en 2011 una de cada cuatro entidades religiosas son de origen musulmán.
Además, esta estadística puede resultar engañosa, ya que la diferenciación legal entre una entidad en la que se practique el culto y otra que acoja cualquier otro tipo de actividades se encuentra en la actualidad muy difuminada entre este colectivo, por lo que el número de mézquitas 'de facto' puede ser todavía más elevado, tal y como reconocen desde el Foro Alternativo de la Inmigración.
De momento, la comunidad musulmana sigue dando pasos para afianzar su integración en la provincia. Así, el pasado mes de marzo las tres federaciones islámicas de la Comunitat Valenciana acordaron por unanimidad la creación de una comisión gestora para la constitución de una Comisión Islámica de la Comunitat, en la que estarán incluidas hasta 22 entidades de Castellón. Esta asociación se convertirá en el único representante oficial de la comunidad musulmana en territorio autonómico.
La comisión tendrá, entre otros objetivos, el de fomentar la integración social de la población musulmana, reforzar el tejido asociativo, dar apoyo a la vida organizativa de los diferentes grupos de entidades islámicas o promover programas preventivos para evitar conductas islamofóbicas.
Problemas
Por otra parte, no han sido pocos los problemas que se han originado a consecuencia de la instalación de mezquitas en varias localidades de Castellón en los últimos años.
El precedente más cercano se dio el año pasado, cuando los vecinos de Benicarló de la calle Isaac Albéniz, situada junto al centro de oración del municipio, iniciaron una recogida de firmas para presentar en el Ayuntamiento un escrito en el que denunciaban los problemas de convivencia que supone la actividad de este recinto entre el vecindario. Los firmantes alegaban que la mezquita causaba problemas de ruido, malos olores y que se cocinaba en su interior.
Antes, en el año 2008, se produjo una operación contra el terrorismo islámico en la provincia, que finalizó con un detenido en Burriana y cuatro en Vila-real. Uno de estos últimos era Mohamed Bouacha, imán de la mezquita de la localidad, lo que provocó que se disparara la alarma entre los vila-realenses.
El recinto, previamente, ya había sido el foco de las quejas de los vecinos, que, al igual que los de Benicarló, relataban conductas incívicas por parte de los asistentes. Asimismo, antes de que se produjera la detención de Bouacha, un decreto del Ayuntamiento ya había ordenado el cierre de la mezquita, puesto que los técnicos municipales alegaban que no cumplía los requisitos necesarios para servir de local de culto.
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