SANTA ELENA,07-08-2009,ideal.es,CELESTE CRUZ
Gaspar Zarrías y Felipe López recorren las salas del museo, en las que se hace un recorrido por el evento de 1212 y se introduce al visitante en la Ruta de los Castillos. /ENRIQUE
El Museo de la Batalla de Navas de Tolosa, ubicado en Santa Elena, fue inaugurado ayer
El centro se convierte en la «piedra angular» de la Ruta de los Castillos y las Batallas
Promover la reflexión sobre la importancia de la Paz es uno de sus objetivos finales
Jaén cuenta desde ayer con otro recurso más para potenciar el turismo en la provincia. Desde su llegada a Despeñaperros, el visitante iniciará un recorrido histórico, patrimonial, paisajístico y cultural cuyo comienzo le trasladará a principios del siglo XIII.
El Museo de la Batalla de Navas de Tolosa, en el municipio de Santa Elena, es la primera y última muestra de ello. Primera, porque desde ayer -inaugurado oficialmente por el secretario de Estado de Política Territorial, Gaspar Zarrías- el visitante conocerá la punta de la lanza del patrimonio jienense; último, pues se incorpora a toda una red de estructuras defensivas, museos y centros de interpretación desarrollada a lo largo y ancho de la provincia por la Diputación Provincial de Jaén, la Junta de Andalucía y el Gobierno de España, en lo que se ha denominado 'Ruta de los Castillos y las Batallas'.
No en vano, Jaén no sólo es el territorio con más castillos, torreones y fortalezas de todo el continente europeo, sino que además, aquí se libraron batallas decisivas para la Historia. Si en el pueblo de Bailén, hace 201 años, mordieron el polvo por primera vez las águilas del ejército de Napoleón, la tierra del municipio de Santa Elena vio caer también al poderoso ejército musulmán, cuatrocientos cuatro años antes. Y mucho, mucho antes, en el 208 antes de Cristo, la Batalla de Baecula contribuyó a la expansión del imperio romano en la península y frenó el poder cartaginés.
Pero será el campo de batalla donde miles de soldados cristianos y musulmanes combatieron un 17 de julio de 1212 lo primero que el visitante conocerá de todo un paraíso que se abre ante él. El paisaje es un elemento patrimonial más interpretado a través de un mirador en forma de torre vigía, estructura más característica del Museo de la Batalla de Navas de Tolosa que ayuda tanto a localizar su ubicación como a conocer el territorio que lo rodea y disfrutar de su gran belleza.
Turismo y Desarrollo
Dos millones de euros ha sido la inversión realizada para su creación con el único objetivo de potenciar el turismo en la provincia.
En palabras del secretario de Estado de Política Territorial, Gaspar Zarrías, «Jaén es un recurso turístico a explotar a través de sus monumentos y su historia. La Batalla de Navas de Tolosa y este Museo son su piedra angular».
Por su parte, el presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Felipe López, ha destacado la «creación de valor y desarrollo que significa unir todos aquellos elementos turísticos que poseemos, creando una sinergia que multiplica el atractivo de Jaén».
López no olvidó durante su discurso al «promotor que inició la Ruta de los Castillos y las Batallas», el escritor jienense Juan Eslava Galán, quien no pudo asistir a la inauguración del centro museístico por problemas de agenda, pero a quien se reconocerá su labor a través de una placa situado en el patio principal del Museo de la Batalla de Navas de Tolosa.
El edificio se extiende sobre una superficie de casi seiscientos metros cuadrados y sobre dos plantas de altura. Espacios amplios y luminosos y el mirador se convierten en parlamentos donde, a través de paneles informativos, enseres y vestimentas, documentos y últimas tecnologías se comprende el porqué de esta contienda ocurrida hace 797 años.
Una mirada crítica
Pero lo más importante no es el contenido, ni el paisaje, ni tampoco la Batalla de Navas de Tolosa. Todo es una herramienta bien utilizada para aprender una mejor lección: conocer la Historia para no repetirla (o, al menos, algunas partes de ella).
Por ello, las últimas salas del Museo son una mirada crítica hacia los conflictos bélicos e invitan al visitante a reflexionar sobre la riqueza de la diversidad y el diálogo a la vez que conoce y comprende las consecuencias de un acontecimiento que cambió el rumbo de la Historia.
Podría decirse que todo este continente museístico es una fábula cuya moraleja es la siguiente: «la Paz es una conquista pendiente».
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
Gaspar Zarrías y Felipe López recorren las salas del museo, en las que se hace un recorrido por el evento de 1212 y se introduce al visitante en la Ruta de los Castillos. /ENRIQUEEl Museo de la Batalla de Navas de Tolosa, ubicado en Santa Elena, fue inaugurado ayer
El centro se convierte en la «piedra angular» de la Ruta de los Castillos y las Batallas
Promover la reflexión sobre la importancia de la Paz es uno de sus objetivos finales
Jaén cuenta desde ayer con otro recurso más para potenciar el turismo en la provincia. Desde su llegada a Despeñaperros, el visitante iniciará un recorrido histórico, patrimonial, paisajístico y cultural cuyo comienzo le trasladará a principios del siglo XIII.
El Museo de la Batalla de Navas de Tolosa, en el municipio de Santa Elena, es la primera y última muestra de ello. Primera, porque desde ayer -inaugurado oficialmente por el secretario de Estado de Política Territorial, Gaspar Zarrías- el visitante conocerá la punta de la lanza del patrimonio jienense; último, pues se incorpora a toda una red de estructuras defensivas, museos y centros de interpretación desarrollada a lo largo y ancho de la provincia por la Diputación Provincial de Jaén, la Junta de Andalucía y el Gobierno de España, en lo que se ha denominado 'Ruta de los Castillos y las Batallas'.
No en vano, Jaén no sólo es el territorio con más castillos, torreones y fortalezas de todo el continente europeo, sino que además, aquí se libraron batallas decisivas para la Historia. Si en el pueblo de Bailén, hace 201 años, mordieron el polvo por primera vez las águilas del ejército de Napoleón, la tierra del municipio de Santa Elena vio caer también al poderoso ejército musulmán, cuatrocientos cuatro años antes. Y mucho, mucho antes, en el 208 antes de Cristo, la Batalla de Baecula contribuyó a la expansión del imperio romano en la península y frenó el poder cartaginés.
Pero será el campo de batalla donde miles de soldados cristianos y musulmanes combatieron un 17 de julio de 1212 lo primero que el visitante conocerá de todo un paraíso que se abre ante él. El paisaje es un elemento patrimonial más interpretado a través de un mirador en forma de torre vigía, estructura más característica del Museo de la Batalla de Navas de Tolosa que ayuda tanto a localizar su ubicación como a conocer el territorio que lo rodea y disfrutar de su gran belleza.
Turismo y Desarrollo
Dos millones de euros ha sido la inversión realizada para su creación con el único objetivo de potenciar el turismo en la provincia.
En palabras del secretario de Estado de Política Territorial, Gaspar Zarrías, «Jaén es un recurso turístico a explotar a través de sus monumentos y su historia. La Batalla de Navas de Tolosa y este Museo son su piedra angular».
Por su parte, el presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Felipe López, ha destacado la «creación de valor y desarrollo que significa unir todos aquellos elementos turísticos que poseemos, creando una sinergia que multiplica el atractivo de Jaén».
López no olvidó durante su discurso al «promotor que inició la Ruta de los Castillos y las Batallas», el escritor jienense Juan Eslava Galán, quien no pudo asistir a la inauguración del centro museístico por problemas de agenda, pero a quien se reconocerá su labor a través de una placa situado en el patio principal del Museo de la Batalla de Navas de Tolosa.
El edificio se extiende sobre una superficie de casi seiscientos metros cuadrados y sobre dos plantas de altura. Espacios amplios y luminosos y el mirador se convierten en parlamentos donde, a través de paneles informativos, enseres y vestimentas, documentos y últimas tecnologías se comprende el porqué de esta contienda ocurrida hace 797 años.
Una mirada crítica
Pero lo más importante no es el contenido, ni el paisaje, ni tampoco la Batalla de Navas de Tolosa. Todo es una herramienta bien utilizada para aprender una mejor lección: conocer la Historia para no repetirla (o, al menos, algunas partes de ella).
Por ello, las últimas salas del Museo son una mirada crítica hacia los conflictos bélicos e invitan al visitante a reflexionar sobre la riqueza de la diversidad y el diálogo a la vez que conoce y comprende las consecuencias de un acontecimiento que cambió el rumbo de la Historia.
Podría decirse que todo este continente museístico es una fábula cuya moraleja es la siguiente: «la Paz es una conquista pendiente».
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