Madrid, 17 marzo 2008 / sisepuede,Beatriz Gurdiel
El pasado 9 de marzo, más de 25 millones y medio de ciudadanos españoles (un 75,32 por ciento del electorado) acudieron a las urnas para decidir el futuro político de España. Tras cuatro años en el poder, el PSOE ganó las elecciones con poco más de 11 millones de votos y un total de 169 diputados.
El PP, con Mariano Rajoy a la cabeza, se consolidó como la segunda fuerza política del país con 154 escaños. Pese al aumento en el número de votos, Zapatero no consiguió la mayoría absoluta necesaria para gobernar en solitario, por lo que ahora toca esperar a que el PSOE pacte con partidos más pequeños (se baraja sobre todo el nombre de CiU) para poder formar Gobierno, un Ejecutivo de quien dependerá, en los próximos cuatro años, la economía, la educación o la sanidad, pero también la situación del colectivo inmigrante que vive en España.
Inmigración: punto clave Nunca antes la inmigración había ocupado tantos minutos de campaña electoral, y nunca antes las políticas migratorias de los diferentes partidos habían interesado tanto a los ciudadanos españoles. Ahora, tras la victoria del PSOE, muchas de las asociaciones que representan a los más de cuatro millones y medio de inmigrantes que viven en este país están satisfechas, y piden a Zapatero que lleve a cabo una política migratoria integradora y justa. Estamos contentos con la victoria de Zapatero», dijo a SÍ Vladimir Paspuel, vicepresidente de la asociación hispano-ecuatoriana Rumiñahui. «Con su voto, España ha dicho sí a la tolerancia y no a la crispación promovida por el PP».
Por su parte, Juan Carlos Rois, presidente de Aesco, ha afirmado: «Aunque como organización no formamos parte de la contienda electoral, para nosotros la victoria del PSOE ha supuesto un alivio ya que eso supone que las propuestas en materia de inmigración del PP no aparecerán en la agenda», un hecho que también ha destacado Riay Tatary, presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de España (Ucide), al afirmar que «para los inmigrantes musulmanes es un alivio» que el PP no haya ganado «después de algunas declaraciones que no han sido adecuadas».
Mario Lorca, presidente de la Plataforma de Derechos Civiles-España, coincide en valorar positivamente «que el PSOE haya ganado», porque considera que «es un gran error que el PP criminalice la condición humana, más aún en un país como España, que tiene una sensibilidad especial» por su pasado emigrante.
Políticas migratorias justas
La satisfacción de varias asociaciones de inmigrantes por el resultado electoral del pasado 9 de marzo va unida a las diferentes peticiones que sus dirigentes han lanzado a Zapatero para que gobierne teniendo en cuenta las necesidades y los derechos de los millones de inmigrantes que viven y trabajan en España.
Desde Rumiñahui, se pide «a todos los partidos con representación parlamentaria que alcancen un Pacto de Estado en materia de inmigración» y se luche «por seguir integrando a los inmigrantes en la vida española, con igualdad de derechos».
En esa misma línea, Rois dijo a SÍ que Aesco desea que «el PSOE continúe con su Plan de Inmigración» y añade su deseo de que en esta legislatura «se acabe de rediseñar el mapa de políticas de acceso, se aborde la reforma de la Ley de Extranjería» y se trabaje para garantizar que los inmigrantes puedan votar en las próximas elecciones.
La petición de Riay Tatary a Zapatero es mucho más concreta. Quiere que profundice en el Acuerdo de Cooperación del Estado español con la Comisión Islámica de España, aprobado en 1992. Concretamente, el presidente de Ucide destacó su deseo de que durante esta nueva legislatura se garantice la enseñanza del Islam a los alumnos musulmanes de las escuelas públicas.
La voz de los inmigrantes
La inmensa mayoría de los más de cuatro millones de inmigrantes que viven y trabajan en España no han tenido voz en estas elecciones. Sin embargo, han seguido de cerca la contienda electoral, saben a quién les habría gustado votar y tienen claro en qué línea quieren que trabaje el Gobierno.
«Yo estoy contenta con que haya ganado el presidente Zapatero, es una nueva oportunidad para los inmigantes», dice a SÍ Cristina Romero, una boliviana que llegó a España hace dos años y trabaja cuidando a una anciana. No obstante, desea que en la próxima legislatura «se haga algo» para que los inmigrantes no estén destinados a trabajar siempre en servicio doméstico o construcción y puedan ejercer sus profesiones; «lo haríamos muy bien», dice.
A Viorel Raimov, un rumano de 32 años que lleva más de dos trabajando en la construcción, no le importa mucho quién vaya a ocupar La Moncloa durante esta legislatura.
«Creo que da lo mismo que el PSOE o el PP estén en el Gobierno», dice a SÍ. «A mí, lo que me interesa es poder seguir trabajando y vivir tranquilo con mi familia». Aun así, tiene un deseo para estos cuatro años: «Que los españoles no crean que los rumanos venimos a ser delincuentes, queremos ser respetados».
Lo que las asociaciones de inmigrantes le piden a Zapatero
- Un Pacto de Estado en materia de Inmigración.
- Una solución para todos los inmigrantes indocumentados, sean los que sean, que les ayude a salir de la sombra.
- Consenso entre los diferentes partidos para buscar las fórmulas de gobierno más justas para todos, inmigrantes y autóctonos.
- La reforma de la Ley de Extranjería, habiendo escuchado lo que las organizaciones de inmigrantes tienen que decir.
- Incluir a todos los extranjeros en los procesos de participación ciudadana.
- Reformar la Constitución, si es necesario, para garantizar que todos los inmigrantes puedan votar en las próximas elecciones. Si no es posible lograr ese acuerdo, impulsar la firma de convenios bilaterales con el mismo objetivo final.
- Impulsar el codesarrollo con otros países para que el fenómeno migratorio suponga una aportación tanto para los países de origen como para los receptores.
- Impulsar la integración plena de los inmigrantes en la sociedad, con igualdad de derechos.
- La aplicación del Acuerdo de Cooperación del Estado español con la Comisión Islámica de España, firmado en 1992.
- Garantizar la enseñanza del Islam a los alumnos musulmanes que estudien en escuelas públicas.
Islam España es el portal del islam en lengua española , un proyecto de futuro para la convivencia,la cooperación y el diálogo.
El pasado 9 de marzo, más de 25 millones y medio de ciudadanos españoles (un 75,32 por ciento del electorado) acudieron a las urnas para decidir el futuro político de España. Tras cuatro años en el poder, el PSOE ganó las elecciones con poco más de 11 millones de votos y un total de 169 diputados.
El PP, con Mariano Rajoy a la cabeza, se consolidó como la segunda fuerza política del país con 154 escaños. Pese al aumento en el número de votos, Zapatero no consiguió la mayoría absoluta necesaria para gobernar en solitario, por lo que ahora toca esperar a que el PSOE pacte con partidos más pequeños (se baraja sobre todo el nombre de CiU) para poder formar Gobierno, un Ejecutivo de quien dependerá, en los próximos cuatro años, la economía, la educación o la sanidad, pero también la situación del colectivo inmigrante que vive en España.
Inmigración: punto clave Nunca antes la inmigración había ocupado tantos minutos de campaña electoral, y nunca antes las políticas migratorias de los diferentes partidos habían interesado tanto a los ciudadanos españoles. Ahora, tras la victoria del PSOE, muchas de las asociaciones que representan a los más de cuatro millones y medio de inmigrantes que viven en este país están satisfechas, y piden a Zapatero que lleve a cabo una política migratoria integradora y justa. Estamos contentos con la victoria de Zapatero», dijo a SÍ Vladimir Paspuel, vicepresidente de la asociación hispano-ecuatoriana Rumiñahui. «Con su voto, España ha dicho sí a la tolerancia y no a la crispación promovida por el PP».
Por su parte, Juan Carlos Rois, presidente de Aesco, ha afirmado: «Aunque como organización no formamos parte de la contienda electoral, para nosotros la victoria del PSOE ha supuesto un alivio ya que eso supone que las propuestas en materia de inmigración del PP no aparecerán en la agenda», un hecho que también ha destacado Riay Tatary, presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de España (Ucide), al afirmar que «para los inmigrantes musulmanes es un alivio» que el PP no haya ganado «después de algunas declaraciones que no han sido adecuadas».
Mario Lorca, presidente de la Plataforma de Derechos Civiles-España, coincide en valorar positivamente «que el PSOE haya ganado», porque considera que «es un gran error que el PP criminalice la condición humana, más aún en un país como España, que tiene una sensibilidad especial» por su pasado emigrante.
Políticas migratorias justas
La satisfacción de varias asociaciones de inmigrantes por el resultado electoral del pasado 9 de marzo va unida a las diferentes peticiones que sus dirigentes han lanzado a Zapatero para que gobierne teniendo en cuenta las necesidades y los derechos de los millones de inmigrantes que viven y trabajan en España.
Desde Rumiñahui, se pide «a todos los partidos con representación parlamentaria que alcancen un Pacto de Estado en materia de inmigración» y se luche «por seguir integrando a los inmigrantes en la vida española, con igualdad de derechos».
En esa misma línea, Rois dijo a SÍ que Aesco desea que «el PSOE continúe con su Plan de Inmigración» y añade su deseo de que en esta legislatura «se acabe de rediseñar el mapa de políticas de acceso, se aborde la reforma de la Ley de Extranjería» y se trabaje para garantizar que los inmigrantes puedan votar en las próximas elecciones.
La petición de Riay Tatary a Zapatero es mucho más concreta. Quiere que profundice en el Acuerdo de Cooperación del Estado español con la Comisión Islámica de España, aprobado en 1992. Concretamente, el presidente de Ucide destacó su deseo de que durante esta nueva legislatura se garantice la enseñanza del Islam a los alumnos musulmanes de las escuelas públicas.
La voz de los inmigrantes
La inmensa mayoría de los más de cuatro millones de inmigrantes que viven y trabajan en España no han tenido voz en estas elecciones. Sin embargo, han seguido de cerca la contienda electoral, saben a quién les habría gustado votar y tienen claro en qué línea quieren que trabaje el Gobierno.
«Yo estoy contenta con que haya ganado el presidente Zapatero, es una nueva oportunidad para los inmigantes», dice a SÍ Cristina Romero, una boliviana que llegó a España hace dos años y trabaja cuidando a una anciana. No obstante, desea que en la próxima legislatura «se haga algo» para que los inmigrantes no estén destinados a trabajar siempre en servicio doméstico o construcción y puedan ejercer sus profesiones; «lo haríamos muy bien», dice.
A Viorel Raimov, un rumano de 32 años que lleva más de dos trabajando en la construcción, no le importa mucho quién vaya a ocupar La Moncloa durante esta legislatura.
«Creo que da lo mismo que el PSOE o el PP estén en el Gobierno», dice a SÍ. «A mí, lo que me interesa es poder seguir trabajando y vivir tranquilo con mi familia». Aun así, tiene un deseo para estos cuatro años: «Que los españoles no crean que los rumanos venimos a ser delincuentes, queremos ser respetados».
Lo que las asociaciones de inmigrantes le piden a Zapatero
- Un Pacto de Estado en materia de Inmigración.
- Una solución para todos los inmigrantes indocumentados, sean los que sean, que les ayude a salir de la sombra.
- Consenso entre los diferentes partidos para buscar las fórmulas de gobierno más justas para todos, inmigrantes y autóctonos.
- La reforma de la Ley de Extranjería, habiendo escuchado lo que las organizaciones de inmigrantes tienen que decir.
- Incluir a todos los extranjeros en los procesos de participación ciudadana.
- Reformar la Constitución, si es necesario, para garantizar que todos los inmigrantes puedan votar en las próximas elecciones. Si no es posible lograr ese acuerdo, impulsar la firma de convenios bilaterales con el mismo objetivo final.
- Impulsar el codesarrollo con otros países para que el fenómeno migratorio suponga una aportación tanto para los países de origen como para los receptores.
- Impulsar la integración plena de los inmigrantes en la sociedad, con igualdad de derechos.
- La aplicación del Acuerdo de Cooperación del Estado español con la Comisión Islámica de España, firmado en 1992.
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