Los científicos afirman que el nuevo descubrimiento ayudará a entender el proceso de la evolución de las galaxias.
Los astrónomos japoneses han descubierto las dos galaxias en estado de fusión más lejanas y antiguas de las que se tiene noticia, según un nuevo estudio publicado en la revista Publications of the Astronomical Society of Japan.
De acuerdo con el informe, los científicos han logrado observar polvo, líneas de oxígeno y carbono del dúo de galaxias, denominado B14-65666, gracias una variedad de radiotelescopios del observatorio ALMA. Según los autores del estudio, debido a la velocidad finita de la luz, la radiación de los objetos, que se encuentran en la constelación de Sextans, llegó hasta la Tierra tardando 13.000 millones de años. Por lo tanto, ahora los astrónomos ven estas galaxias como eran 1.000 millones de años después del Big Bang.
Hasta ahora la estructura ya estaba siendo observada por el telescopio espacial Hubble, que, por su parte, distinguió dos familias de estrellas, pero solo la sensibilidad de ALMA era capaz de mostrar que forman parte de la misma estructura y se mueven a diferentes velocidades al mismo tiempo.
Según los astrónomos, la masa de estrellas en B14-65666 es menor del 10 % de la que hay en la Vía Láctea. Esto significa que la estructura resultante se encuentra en las primeras etapas de su evolución. Sin embargo, a pesar de su juventud, el B14-65666 da a luz cuerpos celestes 100 veces más activos que nuestra galaxia.
"Al poseer abundantes datos de ALMA y Hubble, pudimos juntarlos y demostrar que el B14-65666 es un par de galaxias que se fusionan en la era más temprana del universo (...) Nuestro siguiente paso es obtener más información sobre el B14-65666 y comprender la circulación y acumulación de elementos y materia en el contexto de la formación y evolución de la galaxia resultante", afirma el autor principal del estudio, el investigador en la Sociedad de Japón para la Promoción de la Ciencia y la Universidad de Waseda Takuya Hashimoto.
Los científicos explican que las fusiones son necesarias para la evolución de las galaxias, por lo que rastrean la historia de estos eventos catastróficos, buscando en los rincones más remotos del espacio. El sistema B14-65666, por su parte, ayuda a comprender más este tipo de procesos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario