El líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, durante una rueda de prensa en Milán (Italia). EFE
La Liga Norte italiana se niega a acoger más inmigrantes en la "Padania". "El problema del islam es que es una ley, no es una religión", ha afirmado el líder del partido xenófobo italiano
El líder del partido xenófobo italiano Liga Norte, Matteo Salvini, afirmó hoy que "el islam es una ley, no una religión" y opinó que es contraria a los "valores, derechos y libertades" de los países occidentales.
"El problema del islam es que es una ley, no es una religión. En nombre de un dios impone una ley, en mi opinión, incompatible con nuestros valores, derechos y libertades", dijo Salvini en una visita a la localidad de Umbertide, en la provincia de Perugia, en el centro de Italia.
El partido de Salvini acude a las próximas elecciones generales del 4 de marzo coligado con otras formaciones de derechas, como la conservadora Forza Italia, de Silvio Berlusconi, o la ultraderechista Fratelli d'Italia, de Giorgia Meloni.
Estos partidos coligados podrían vencer las elecciones, según los sondeos, con cerca del 36 % de los apoyos y superar al antisistema Movimiento Cinco Estrellas, que encabeza las preferencias de voto en solitario.
Salvini, que ha endurecido su discurso sobre la inmigración irregular en las últimas semanas, atacó el Corán porque dijo que defiende que "la mujer vale menos que el hombre" y que "la ley islámica vale más que la italiana". "No quiero que en Italia se asienten personas para las que la mujer vale menos que el hombre", subrayó.
Salvini visitó esta localidad italiana en la que en los últimos años se está construyendo un centro cultural islámico que ha generado polémicas y que en junio del pasado año enfrentó a la comunidad islámica con el ayuntamiento, por unas acusaciones que aseguraban que estaba siendo financiado por Qatar, algo que fue desmentido por el imán de Umbertide.
"Detrás de la construcción de esta mezquita hay fondos de Qatar. ¿Por qué en el corazón de (la región de) Umbría tiene que haber un asentamiento de un país islámico extremista?", preguntó. "Es necesario cerrar las mezquitas ilegales, saber quién las financia, quién está detrás, de dónde viene el dinero, quién predica y qué predica", concluyó.
Estas declaraciones se producen después de que el propio Salvini afirmara en los últimos días que "la inmigración descontrolada conlleva caos, rabia y desencuentro social", tras el tiroteo racista en la ciudad de Macerata, donde resultaron heridas seis personas negras.
Otro miembro de su partido y candidato a la presidencia de la región de Lombardía (norte), Attilio Fontana, fue muy criticado el pasado enero cuando llamó a defender "la raza blanca" frente a la invasión de los inmigrantes.
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