Jerusalén, 25/06/13, (EFE).
Diversas ONG de defensa de los derechos humanos denunciaron hoy la aprobación ayer, en primera lectura, en la Kneset (Parlamento) de la conocida como Ley Prawer-Begin, que amenaza con el desplazamiento forzoso a decenas de miles de árabes beduinos que residen en el desierto del Negev.
La norma, que aún tiene que superar los trámites de segunda y tercera lectura y que fue aprobada por 43 votos a favor y 40 en contra, "desposeerá a estas comunidades nómadas de su tierra, destruirá sus pueblos y resolverá todas las reclamaciones de tierra pendientes a favor del estado y en su contra", denuncia la ONG Adallah. Por su parte, la Asociación de Derechos Civiles de Israel (ACRI) y la ONG de arquitectos Bimkom-Planificadores por los Derechos de Planificación , reiteraron su "fuerte oposición" al plan, que "en su forma actual solo agravará la alienación y discriminación de los residentes beduinos de los pueblos no reconocidos del Negev".
"Provocará el desplazamiento y expulsión forzosa de decenas de pueblos y decenas de miles de residentes beduinos. Los desposeerá de sus propiedades y derechos históricos a sus tierras, destruyendo el tejido social de sus comunidades y condenando el futuro de miles de familias a la pobreza y el desempleo", aseguran estas organizaciones en un comunicado.
ACRI y Bimkom comparan también el tratamiento de las comunidades beduinas con el que se da a las comunidades judías, "algunas de las cuales está previsto levantar en las ruinas de poblados beduinos".
La ley está en camino de ser aprobada "a pesar de la fuerte oposición de la comunidad beduina árabe, el liderazgo político árabe, la sociedad civil, los académicos y la comunidad internacional", aseguró en un comunicado Thabet Abu Rass, director de Adalah en el Negev.
Según Rass, el gobierno "se ha negado al diálogo" y ha rechazado todos los planes alternativos y soluciones propuestas por la comunidad afectada, imponiendo este plan que, denuncia, "viola sus derechos constitucionales y humanos y aumentará la pobreza y marginación de los beduinos y convertirá sus comunidades en centros de crimen, violencia y pobreza".
Varios diputados árabes reaccionaron en la tarde de ayer con ira durante la presentación y voto de la ley ayer en la Kneset. Mohamed Barake, del partido Hadash, calificó la ley de "racista" y "obscena" y la rompió en pedazos en la tribuna del orador mientras indicaba que pertenece "al cubo de basura de la historia", informó el digital Ynet. Una reacción similar tuvo Ahmad Tibi, de la Lista Árabe Unida-Taal, que echó un vaso de agua por encima del texto y sentenció que la propuesta legislativa era "racista" e "hipócrita", antes de ser expulsado del hemiciclo junto a Barake y otros diputados árabes que protestaban.
"Injusta", "inmoral" e "inhumana" fueron otros de los apelativos utilizados por el diputado Ibrahim Sarsur (Taal), que aseguró que esta ley "declara la guerra al público árabe". La ley regulariza los asentamientos de alrededor de doscientos mil beduinos que residen en el desierto del Negev, incluidas las reclamaciones territoriales de estas comunidades nómadas sobre su derecho a las tierras que pueblan desde antes de la creación del estado de Israel, en 1948.
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